Silvia Pinal, la legendaria actriz mexicana, fue hospitalizada recientemente debido a una infección de las vías urinarias, según informó Pedro Sola. La noticia se dio a conocer durante la emisión del programa Ventaneando el 22 de noviembre, causando preocupación entre sus seguidores y la prensa, dado que Pinal cumplió 93 años hace unos meses.
“El día de ayer fue hospitalizada por algunas complicaciones de salud, extraoficialmente sabemos que fue por presión baja y una arritmia cardiaca (...) Hemos estado en una guardia constante, no ha habido una declaración oficial por parte de los hijos”, mencionaron en Ventaneando.
Alejandra Guzmán, quien se encontraba en Xalapa, Veracruz por compromisos laborales, explicó que la infección es parte de los problemas de salud que su madre enfrenta debido a su avanzada edad. A pesar de la gravedad inicial de la situación, la cantante expresó alivio al comunicar que su madre ya se encuentra mucho mejor. La hija de Pinal compartió que, a pesar de la hospitalización, su madre ha mostrado signos de recuperación, incluso bromeando con ella, lo cual considera una buena señal:
“La veo mejor, ya me mentó la madre, eso significa que ya está mejor, me sacó un sustote (...) Fue como una infección, tiene cosas en las vías urinarias, pero también es parte de la edad y todo”, sentenció.
La noticia de la hospitalización de Silvia Pinal ha generado interés y preocupación, no solo por su estado de salud, sino también por su legado en la industria cinematográfica de México. La actriz ha sido una figura emblemática en el cine y la televisión, y su bienestar es seguido de cerca por sus admiradores y la comunidad artística.
¿Qué tan peligrosa es una infección de las vías urinarias en una persona de la tercera edad?
Las infecciones de las vías urinarias (IVU) en personas de la tercera edad representan un riesgo significativo debido a diversos factores asociados con el envejecimiento. En este grupo poblacional, el sistema inmunológico tiende a debilitarse, lo que los hace más susceptibles a infecciones. Además, condiciones comunes en ancianos, como diabetes, cateterismo frecuente o problemas de próstata, aumentan el riesgo de desarrollar una IVU.
Uno de los principales peligros es que los síntomas pueden ser atípicos o menos evidentes en las personas mayores. Mientras que síntomas clásicos incluyen ardor al orinar, urgencia urinaria y dolor, los ancianos pueden presentar confusión, agitación o cambios en el estado mental, lo que a menudo lleva a diagnósticos tardíos.
Las IVU no tratadas en ancianos pueden derivar en complicaciones graves, como la progresión a una infección renal (pielonefritis) o incluso sepsis, una respuesta inflamatoria generalizada del organismo que puede ser potencialmente fatal. Por tanto, es crucial una detección y tratamiento rápidos.
El manejo incluye antibióticos recetados por un médico y medidas de prevención, como una adecuada ingesta de líquidos, higiene personal y, en algunos casos, suplementos de arándano. La atención médica oportuna es fundamental para mitigar los riesgos en personas de la tercera edad.