¿Tianguización? Los puestos ambulantes afuera de Bellas Artes dividen opiniones de capitalinos

La apariencia actual de Bellas Artes desató un debate porque hay muchos vendedores ambulantes a su alrededor, diversas personas que suelen publicar en X han comparado el edificio histórico con un tianguis y lamentan que no pueden tomar fotografías en el lugar.

Muchas personas argumentan que el lugar se ve “feo” y “desordenado”, pues las personas que venden colocan su mercancía sobre sábanas en los alrededores del lugar, comparando Bellas Artes con un tianguis, otros más aseguran que la venta es legítima pues los comerciantes no tienen otra alternativa para subsistir.

Esto ha llevado a que muchas personas nombren el fenómeno como “tianguización”, lo cual despertó críticas sobre ser un término clasista.

Hace un mes, la Cineteca Nacional de México fue objeto de críticas debido a la presencia de un tianguis en su interior. Este espacio cultural, conocido por proyectar cine alternativo y de festivales, ha sorprendido a sus visitantes al permitir la venta de productos como discos, ropa de segunda mano y otros artículos, lo que ha llevado a comparaciones con el famoso Tianguis Cultural del Chopo.

La situación desató una serie de reacciones en redes sociales, donde algunos usuarios defienden el derecho de las personas a vender en espacios públicos, mientras que otros consideran que esta actividad afecta la imagen del recinto. Alma Maldonado, investigadora del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (CINVESTAV), expresó su sorpresa en la plataforma X, destacando la transformación del lugar en un mercado similar al del Chopo.

Entre las voces que se sumaron al debate se encuentra Sandra Cuevas, ex alcaldesa de Cuauhtémoc, quien cuestionó si retirar a los vendedores sería considerado un acto clasista o violento. Cuevas enfatizó la necesidad de orden y limpieza en el país, lo que generó aún más discusión sobre el tema.

Las opiniones en redes sociales han sido variadas, con comentarios que van desde la crítica a la comercialización en un espacio cultural hasta la defensa de los vendedores como trabajadores que buscan ganarse la vida. Algunos usuarios han señalado que la presencia del tianguis es un reflejo de problemas más amplios en la ciudad, mientras que otros han manifestado su descontento con la popularización de espacios considerados aspiracionales.

La controversia en torno a la Cineteca Nacional pone de manifiesto las tensiones entre la preservación de espacios culturales y la realidad económica de muchos ciudadanos que recurren al comercio informal como medio de subsistencia. Este debate continúa generando opiniones encontradas y destaca la complejidad de equilibrar el acceso a la cultura con las necesidades económicas de la población.