Durante la madrugada del domingo 17 de noviembre, habitantes de la ciudad de Cancún, Quintana Roo, se vieron sorprendidos por detonaciones de armas de fuego que habrían cobrado la vida de por lo menos cuatro personas.
Según los reportes preliminares, el ataque armado ocurrió en fraccionamiento Paseos del Mar, en la Región 251, alrededor de las dos de la mañana.
En un domicilio de la calle Isla Comores, un grupo de sujetos no identificados descargó varias balas, lo que generó una sensación de alerta entre vecinos de la zona. Luego de escuchar el estruendo de los tiros y el llanto de una niña, las y los testigos solicitaron la presencia de las autoridades.
En atención a los reportes que llegaron a la línea del 911, elementos de seguridad se trasladaron al fraccionamiento referido y confirmaron que sobre Isla Comores, casi esquina con Isla Aruba, estaban los cuerpos de cuatro personas, así como una menor de edad que fue herida durante la agresión.
Además de la Policía Municipal, al sitio arribaron miembros del servicio de paramédicos, quienes confirmaron el deceso de las cuatro víctimas. Reportes extraoficiales compartidos por la prensa local señalan que la mujer y los tres hombres ejecutados presentaban al menos un impacto de bala en la cabeza. En tanto, la niña —quien presuntamente quedó huérfana a raíz de esta agresión— fue trasladada a un hospital cercano para recibir atención médica.
La zona quedó bajo resguardo de los uniformados y, más tarde, se presentaron agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) para el levantamiento de indicios y el traslado de los cuerpos al Servicio Médico Forense (Semefo).
Horas más tarde, la Fiscalía estatal emitió un comunicado en el que dio a conocer avances preliminares en la investigación. Supuestamente, una de las hipótesis es que el ataque estaría relacionado con actividades de narcomenudeo.
“De acuerdo con las primeras investigaciones, las evidencias aseguradas y el testimonio de testigos, los ahora occisos estarían implicados en delitos contra la salud. Además, el inmueble donde ocurrieron los hechos era utilizado como punto de consumo de estupefacientes”, expuso la corporación.
Semanas antes de este suceso, concretamente el 22 de septiembre, se registró otra agresión armada en este mismo fraccionamiento, en la Supermanzana 251.
Aquella noche, según los informes disponibles, un joven de aproximadamente 20 años de edad fue asesinado por motosicarios cuando transitaba por a calle Isla Trinidad.
Varios vecinos alertaron las autoridades luego de escuchar los disparos, pero cuando llegaron al sitio, la víctima ya no contaba con signos vitales. El joven, quien aparentemente era marinero en la zona hotelera, recibió varios impactos en el cuello y el tórax que le causaron a muerte en pocos minutos.