Siete pasos para preparar mousse de cáscaras de berenjena ideal para perder peso

El mousse de cáscaras de berenjena es una opción de postre innovadora y saludable que permite aprovechar al máximo este vegetal, en especial la cáscara, a menudo desechada. Este delicioso postre no solo es una alternativa saludable, sino que también aporta numerosos beneficios a la salud, además de ser una preparación ideal para quienes buscan cuidar su bienestar sin renunciar al sabor.

De acuerdo con el artículo “Berenjena, hortaliza con muchos beneficios y poco consumida en nuestro país” del Fideicomiso de Riesgo Compartido (FIRCO) de México, la berenjena posee un efecto laxante, lo que puede ayudar a mejorar la regularidad y evitar el estreñimiento. Además, está compuesta en un 90% de agua, lo que es muy útil para incluirla en dietas bajas en calorías.

La berenjena contiene una gran cantidad de nutrientes, como antioxidantes, fibra y vitaminas, que contribuyen a la desintoxicación del organismo. Entre los antioxidantes se encuentran las antocianinas, nasunina, la luteína y la zeaxantina, componentes que pueden ayudar a eliminar las radicales libres (moléculas que pueden dañar las células si se acumulan en grandes cantidades), según datos del sitio de información médica, Medical News Today.

Este mousse es perfecto para diversas ocasiones, desde una reunión familiar hasta una cena especial o un postre saludable para después de la comida. Su preparación es sencilla y su sabor suave lo hacen ideal para acompañar cualquier tipo de comida.

Crear un mousse a partir de cáscaras de berenjena es una forma original de aprovechar este subproducto y reducir el desperdicio de alimentos. A continuación, una receta sencilla para elaborar un mousse dulce de cáscaras de berenjena.

Ingredientes:

• Cáscaras de 2-3 berenjenas (bien lavadas)
• 150 ml de leche (puede ser de origen vegetal, como leche de almendra o avena)
• 80 g de azúcar (puedes ajustar la cantidad al gusto)
• 1 cdita. de extracto de vainilla
• 1 cdita. de canela en polvo (opcional)
• 200 ml de crema para batir (crema de leche)
• 1 cda. de gelatina sin sabor (o agar-agar para versión vegetariana)
• Agua (para hidratar la gelatina)

Instrucciones:

• Preparar las cáscaras: corta las cáscaras de las berenjenas en tiras finas. Cocina las cáscaras en agua hirviendo por 5-7 minutos, hasta que estén tiernas. Escúrrelas bien y déjalas enfriar.
• Licuar la mezcla: coloca las cáscaras cocidas en una licuadora junto con la leche, el azúcar, el extracto de vainilla y la canela (si deseas un toque de especias). Procesa hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Prueba y ajusta el dulzor al gusto.
• Hidratar la gelatina: en un recipiente pequeño, hidrata la gelatina en 3-4 cucharadas de agua fría. Deja reposar unos minutos hasta que la gelatina absorba el agua. Luego, caliéntala en el microondas (unos 10 segundos) o al baño maría hasta que se disuelva completamente.
• Incorporar la gelatina: agrega la gelatina disuelta a la mezcla de berenjena en la licuadora y licúa nuevamente para integrarla bien.
• Batir la crema: en un recipiente aparte, bate la crema para batir hasta que esté espesa y forme picos suaves.
• Combinar y refrigerar: incorpora la mezcla de berenjena a la crema batida, utilizando movimientos envolventes para conservar el aire y la textura ligera. Vierte el mousse en recipientes individuales o en un bol grande y refrigera por al menos 3 horas para que cuaje.
• Servir: decora con canela en polvo, ralladura de limón o frutas frescas antes de servir.

La cáscara de berenjena es una fuente rica en nutrientes y compuestos beneficiosos para la salud. Estos son los principales beneficios de su consumo, según el artículo “Beneficios para la salud de la berenjena y recetas sabrosas” escrito por la dietista, Natalie Butler, de la Universidad Estatal Stephen F. Austin, Nacogdoches, Texas.

• Antioxidante: La cáscara de berenjena es rica en antocianinas, un tipo de antioxidante que ayuda a combatir el estrés oxidativo y a proteger las células del daño causado por los radicales libres, reduciendo el riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer y enfermedades cardiovasculares.
• Regulación del azúcar en sangre: puede ayudar a regular los niveles de glucosa en sangre, lo que es beneficioso para las personas con diabetes o aquellos que buscan prevenir problemas relacionados con la resistencia a la insulina.
• Mejora la digestión: es una excelente fuente de fibra, lo que favorece una digestión saludable, mejora el tránsito intestinal y previene el estreñimiento.
• Propiedades cardioprotectoras: los compuestos como las antocianinas, también ayudan a proteger la salud del corazón, reduciendo el colesterol malo (LDL) y promoviendo una circulación sanguínea más saludable.
• Control del peso: su alto contenido en fibra y bajo en calorías hace que la cáscara de berenjena sea un aliado en dietas para el control del peso, al ayudar a sentirse saciado por más tiempo.

Incorporar la cáscara de berenjena en la dieta es una forma sencilla y natural de aprovechar estos beneficios para mejorar la salud general.