Las autoridades de Estados Unidos continúan ejecutando acciones en contra de todo aquel grupo criminal que se dedique al tráfico de fentanilo. La última acción de este tipo ocurrió el pasado 31 de octubre, día en el que el Departamento del Tesoro emitió sanciones contra cinco presuntos miembros clave de La Línea, brazo armado del Cártel de Juárez.
Según informó el país de las barras y estrellas, las recientes sanciones en contra de los cinco mexicanos y dos empresas con sede en Chihuahua y Jalisco se ejecutaron en acciones coordinadas con la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de México.
Esto luego de que los ahora acusados fueran vinculados directamente con La Línea y sus actividades delictivas.
“Estados Unidos, en estrecha coordinación con nuestros socios mexicanos, sigue comprometido a hacer todo lo posible para exigir cuentas a estos grupos y para desmantelar su capacidad de lucrarse y, en última instancia, operar estos esquemas delictivos”, declaró Wally Adeyemo, subsecretario del Tesoro.
En su comunicado, el Departamento del Tesoro destacó que, además del tráfico de drogas sintéticas, La Línea es vinculada a delitos como:
- Cobro de impuestos en la frontera de EEUU. Presuntamente controlan el movimiento de mercancía de otras organizaciones criminales a través del Valle de Juárez.
- Tala ilegal.
- Robo de automóviles.
- Tráfico de migrantes.
“Además, La Línea y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) han estado trabajando juntos desde septiembre de 2023, como la fuente de suministro de cocaína, metanfetamina y fentanilo de La Línea”, agregó el Departamento del Tesoro.
Datos de las autoridades de México refieren que también se dedican son responsables del delito de extorsión, secuestro, homicidio, tráfico de armas y lavado de dinero.
¿Qué se sabe sobre La Línea?
La Línea fue creado para responder a las ordenes del Cártel de Juárez, cuyo líder más reconocido fue Amado Carrillo Fuentes, ‘El Señor de los Cielos’.
Originalmente, la célula delictiva estaba integrada por policías y militares desertores, cuyo objetivo era defender sus territorios fronterizos en Ciudad Juárez.
Sin embargo, tal y como sucede con otras organizaciones criminales, tras la caída de sus cabecillas más importantes y la guerra contra el Cártel de Sinaloa por el control de rutas para el tráfico de drogas, La Línea comenzó a independizarse y a operar con mayor libertad.
En 2015, la DEA catalogó a esta célula delictiva como “un cártel de narco en formación”. Hoy en día es considerada “una violenta organización de narcotráfico”.