Las redes sociales son un hervidero de ocurrencias que rápidamente se convierten en fenómenos virales. Un reciente ejemplo de esto es el video de un tiktoker mexicano que ha desatado tanto risas como controversia. Omar Maldonado Hinojosa, conocido como Omahi, ha captado la atención de millones con su inusual estrategia para colar a su novia en el cine sin pagar el boleto.
En su grabación, Omar muestra cómo logró ingresar a la sala de cine con su pareja al comprar ropa extra grande, simulando ser un hombre con sobrepeso.
“La ropa es gigante y la idea es que los dos quepamos en ella para ver si alguien se da cuenta. Nos metimos ambos y cabíamos perfecto”, explicó en el video, que ha acumulado más de 14 millones de reproducciones.
El clip inicia con Omar en la taquilla, donde compra un solo boleto para sí mismo, mientras que su novia se disfraza con la ropa oversized. A medida que se dirigen hacia la sala, el tiktoker camina con dificultad, tratando de dar la impresión de que su apariencia es genuina. El video culmina con la pareja sentada en la sala de cine, donde Omar celebra su astucia.
Las reacciones a la publicación no se han hecho esperar. Los usuarios de TikTok han expresado opiniones divididas. Algunos han sido críticos, indicando que la acción es ilegal. “Que duro eres, todo por no pagar otra entrada más”, comenta un usuario, mientras que otro agrega: “Eso es ilegal”. Otros, sin embargo, han considerado el truco como ingenioso y divertido, destacando la creatividad de Omar al tratar de ahorrar dinero. “Lo normal es hacer pasar dulces o comida, bro. Esto ya es otro nivel”, señala un comentarista.
La polémica desatada por este video ha abierto un debate más amplio sobre los límites de la creatividad y el ingenio en las redes sociales. Por un lado, muchos usuarios aplauden la originalidad del enfoque de Omar, mientras que otros se preocupan por las implicaciones éticas y legales de su acción. La línea entre el humor y la ilegalidad se vuelve borrosa en un contexto donde la viralidad a menudo se mide en likes y compartidos, sin considerar las repercusiones.
El impacto de este video ha llevado a que muchos se cuestionen la cultura del ahorro extremo, especialmente en un mundo donde el costo de entretenimiento puede ser elevado. Las estrategias para evitar gastos, aunque a veces ingeniosas, pueden cruzar límites que muchos consideran inaceptables.