Alejandra Guzmán estaría enfrentando un momento complicado en su vida personal. Según la revista TVNotas, la cantante habría recaído en el consumo de alcohol, situación que se habría agravado tras la confirmación de que el pequeño Apolo, hijo de Mayela Laguna, no es biológicamente hijo de Luis Enrique Guzmán, hermano de Alejandra.
Este resultado fue revelado después de realizarse pruebas de ADN, lo que habría generado un impacto emocional en la artista.
“Ella lo ha dicho, es una mujer cabrona. Sin embargo, su pasado lo carga en su espalda como si fuera una cruz. Desde pequeña presenció los problemas que vivían sus padres. Después vino el pleito con su hija y, para rematar, su corazón se rompió al enterarse que el niño de Mayela no es hijo de su hermano, Luis Enrique Guzmán. Son temas que la están acabando emocionalmente”, dijo una supuesta amiga de la familia Pinal a la revista mexicana.
Recientemente, la intérprete de Hacer el amor con otro protagonizó un incidente en un aeropuerto, donde sufrió una caída que desató rumores sobre su estado.
Este episodio ha sido interpretado por algunos como un indicio de que la cantante podría estar atravesando un momento de vulnerabilidad emocional y habría recaído en el alcoholismo.
Por su parte, la supuesta fuente cercana a la artista, citada por TVNotas, afirmó que Alejandra intenta mostrar fortaleza, pero en realidad estaría lidiando con una profunda tristeza.
La situación se complica aún más debido a las tensiones familiares que la cantante ha enfrentado, especialmente en relación con su hija Frida Sofía.
Estos conflictos, sumados a la reciente revelación sobre Apolo, parecen haber afectado significativamente el bienestar emocional de Alejandra.
La fuente mencionada por la revista destacó que la artista lleva consigo el peso de su pasado, incluyendo los problemas que presenció en su familia desde pequeña.
“Está dolida. A veces nos dice que ‘está bien’ y no es cierto. Al parecer se refugia en el alcohol. Ha tenido varios episodios que la hacen vulnerable. El dolor más grande que tiene ahora es el no poder recononciliarse con su hija. Eso es lo único importante para cualquier mamá. Extraña a Frida. Su deseo es ver su carita, su sonrisa, hasta extraña las peleas tontas”.
A pesar de las dificultades, Alejandra Guzmán continúa con su carrera profesional, manteniendo una imagen pública de éxito y alegría. Sin embargo, según la fuente de TVNotas, cuando se encuentra en la privacidad de su hogar, Alejandra enfrenta una realidad distinta, marcada por la depresión y el dolor emocional.
Ante estas declaraciones, ahora el productor Iván Cochegrús, amigo cercano de la familia Pinal, negó que la “reina de corazones” haya recaído en el consumo de alcohol.
“Está muy bien, no tiene ningún problema. Ella tiene dos caderas de titanio, por ningún motivo tuvo algo mayor y está lista para irse ya a su gira”, dijo sobre la caída de Alejandra en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México en una reciente celebración de la periodista Maxine Woodside por el aniversario de su programa.
El productor de teatro afirmó que “La Guzmán” no se expone a la tentación de la bebida ni en las reuniones familiares, descartando así que haya recaído.
“En las últimas festividades, la boda de Giordana (hija de Luis Enrique Guzmán), el 10 de mayo, el cumpleaños de Alejandra Guzmán, que yo se lo organicé, al igual que el cumpleaños de la señora Pinal, pues Alejandra ya cuando ve que va a salir una botella o algo, ella se retira, ella nunca se ha quedado”, expresó, y respecto a la mencionada caída en el aeropuerto, recalcó:
“Ella lo que me comenta es que venía muy efusiva, muy contenta de venir de Huatulco con su madre después de que estuvo en el hospital en diciembre... Alejandra no está en ninguna recaída”.