De El Vicentillo a El Menchito: Así ha sido la caída en EEUU de los herederos del narco

Hijos de grandes capos han visto su poder desmoronarse mientras cooperan o luchan contra el sistema judicial estadounidense

Hijos de El Mayo Zambada, El Chapo Guzmán y El Mencho han enfrentado a la justicia en EEUU. (Anayeli Tapia/Infobae)

En los últimos años, la caída de los “príncipes” del narcotráfico en México ha sido una constante en la lucha contra los grandes cárteles de la droga. Los hijos de los capos más poderosos, que durante años crecieron en la sombra de sus padres y desempeñaron roles clave en la expansión de sus imperios criminales, han comenzado a sucumbir ante el peso de la justicia, principalmente en Estados Unidos.

Estos personajes han pasado de ser líderes emergentes a reclusos en prisiones norteamericanas, algunos ya liberados tras llegar a acuerdos.

Estos “príncipes” no solo heredaron el poder y las responsabilidades de sus padres, sino también las batallas internas y externas que implican el manejo de organizaciones delictivas. Sin embargo, la presión internacional, los conflictos internos entre facciones y la traición de algunos de sus propios aliados han acelerado su caída.

A través de juicios y colaboraciones con la justicia, estos narcojuniors han tenido que enfrentarse a las consecuencias de su participación en las actividades ilícitas de los cárteles que ayudaron a dirigir.

El Menchito

"El Menchito", hijo de El Mencho, espera sentencia. | Foto: Jovani Pérez - Infobae México

Rubén Oseguera González, conocido como “El Menchito”, es hijo de Rubén Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Desde joven, estuvo inmerso en las actividades criminales de la organización, según testigos como Óscar Nava Valencia, alias “El Lobo”. Su introducción al narcotráfico se remonta a su adolescencia, y desde entonces jugó un papel clave dentro del grupo.

Se le señaló como el segundo al mando dentro del CJNG, encargado de la seguridad de los cargamentos de drogas que la organización enviaba a Estados Unidos, lo que subraya su importancia en las operaciones internacionales del cártel. También se le vinculó con eventos de violencia extrema, como el derribo de un helicóptero del Ejército Mexicano en 2015, cuando fuerzas de su padre atacaron a las autoridades en Villa Purificación.

“El Menchito” fue detenido en 2015 por las autoridades mexicanas bajo cargos de posesión de armas de fuego y delincuencia organizada. Se le atribuye la colaboración en el trasiego de grandes cantidades de cocaína y metanfetaminas hacia Estados Unidos. Su proceso judicial culminó en su extradición a ese país en 2020, y finalmente este año fue encontrado culpable de los delitos de tráfico de drogas y posesión de armas.

Durante su juicio varios testigos testificaron en su contra, describiendo cómo acompañaba a su padre en actividades criminales y portaba armas de alto calibre, como rifles lanzagranadas.

La sentencia del joven, nacido en California y con nacionalidades estadounidense y mexicana, será dictada el 10 de enero de 2025 por la juez de distrito Beryl Howell.

El Güero Moreno

Joaquín Guzmán López, "El Güero Moreno", se entregó a las autoridades de EEUU el 25 de julio. (Anayeli Tapia/Infobae)

Joaquín Guzmán López, también conocido como “El Güero Moreno”, es hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán y de Griselda Guadalupe López Pérez, segunda esposa del capo.

A diferencia de su hermano Ovidio, Joaquín mantuvo un perfil más discreto dentro del Cártel de Sinaloa, pero era una figura clave dentro de la organización, especialmente tras la captura de su padre. Su involucramiento en el narcotráfico se intensificó tras el asesinato de su hermano Édgar en 2008, momento que marcó un punto de inflexión en su carrera delictiva.

Joaquín ha estado vinculado a actividades de gran relevancia dentro del cártel, desde el tráfico de drogas hasta la participación en la famosa fuga de su padre del Penal del Altiplano en 2015. Las autoridades de Estados Unidos lo señalan como clave en la producción y distribución de metanfetaminas y fentanilo. Se ha reportado que supervisaba numerosos laboratorios en Sinaloa.

El 25 de julio de 2024, Joaquín Guzmán López sorprendió al entregarse a las autoridades estadounidenses voluntariamente, llevando consigo contra su voluntad a Ismael “El Mayo” Zambada.

Se ha declarado no culpable de los cargos en su contra. Su proceso legal continúa en curso, con una próxima audiencia programada para enero de 2025.

El Ratón

Ovidio Guzmán López, conocido como "El Ratón", fue detenido en 2023. (Infobae)

Ovidio Guzmán López, conocido como “El Ratón”, es otro de los hijos de El Chapo y un líder clave de la facción conocida como “Los Chapitos” dentro del Cártel de Sinaloa.

Su implicación en el Cártel de Sinaloa quedó clara en 2019, cuando fue arrestado por primera vez en lo que se conoce como el “Culiacanazo”, un operativo que terminó con su liberación por órdenes del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador para evitar una escalada de violencia en Culiacán, después de que el cártel desatara el caos en la ciudad en un intento de rescatarlo. Este episodio mostró el poder de la facción de “Los Chapitos” y las tensiones dentro del cártel, mientras algunos sectores cuestionaban la estrategia de seguridad del gobierno mexicano.

El 5 de enero de 2023, Ovidio fue nuevamente capturado por el Ejército mexicano en un operativo en la sindicatura de Jesús María, Sinaloa. Esta detención también provocó una respuesta violenta del cártel, pero las autoridades lograron trasladarlo a la Ciudad de México y, posteriormente, extraditarlo a Estados Unidos en septiembre de 2023.

Actualmente enfrenta varios cargos en la Corte del Distrito Norte de Illinois, donde se le acusa de conspiración para distribuir drogas como cocaína, heroína, marihuana y metanfetaminas, además de lavado de dinero y portación de armas de fuego. También es señalado de producción y tráfico de fentanilo. A lo largo de su proceso, se ha declarado no culpable.

El Vicentillo

"El Vicentillo" Zambada cooperó con la DEA y fue liberado en 2021 FOTO: ALBERTO VERA/CUARTOSCURO.COM

Jesús Vicente Zambada Niebla, mejor conocido como “El Vicentillo”, es hijo de “El Mayo” Zambada, uno de los fundadores y líderes del Cártel de Sinaloa. Nacido en Culiacán, Sinaloa, el 10 de mayo de 1975, creció en el corazón del narcotráfico, lo que lo llevó a convertirse en un miembro clave de la organización desde una edad temprana. A lo largo de su carrera criminal, Zambada Niebla fue considerado el heredero natural del imperio de su padre, dirigiendo operaciones cruciales del cártel como la coordinación de rutas de tráfico de drogas que conectaban México con Colombia y Estados Unidos.

En la década de 2000, su influencia en el cártel se consolidó cuando asumió la responsabilidad de coordinar el transporte de cargamentos de drogas desde Culiacán, Ciudad de México y Cancún hacia la frontera con Estados Unidos. Su papel como líder operativo lo colocó junto a figuras importantes del cártel, como su tío Jesús “El Rey” Zambada, en una época en la que el Cártel de Sinaloa estaba en la cúspide de su poder.

El Vicentillo vivió la vida de un capo hasta que, en 2009, su mundo comenzó a desmoronarse. El arresto de su tío “El Rey” Zambada, junto con la creciente presión del gobierno mexicano y los conflictos dentro del cártel, lo empujaron a considerar colaborar con las autoridades estadounidenses. Según informes, su decisión de cooperar con la DEA habría contado con la aprobación de su padre, lo que permitió a Zambada Niebla entrar en contacto con agentes estadounidenses en secreto.

Sin embargo, en marzo de 2009 fue arrestado en la Ciudad de México por las autoridades mexicanas, un hecho que algunos atribuyen a una traición de Joaquín “El Chapo” Guzmán, en venganza por la muerte de su hijo, Édgar Guzmán López. Tras su captura, Zambada Niebla fue extraditado a los Estados Unidos en 2010, donde formalizó su cooperación con el gobierno estadounidense.

Durante su tiempo en prisión, El Vicentillo proporcionó información valiosa que llevó a la captura de varios miembros clave del Cártel de Sinaloa, incluyendo figuras como Rodrigo Aréchiga Gamboa, alias “El Chino Ántrax”, y Manuel Torres Félix, alias “El M1″. Su testimonio fue esencial en el juicio contra Joaquín “El Chapo” Guzmán.

A cambio de su colaboración, Zambada Niebla recibió una sentencia reducida y fue liberado en 2021. Desde entonces, ha vivido en los Estados Unidos bajo una nueva identidad, protegido por las autoridades.

Mayito Gordo

EL Mayito Gordo aún cumple su condena en libertad. Infobae: Gibrán Casas Cedillo

Ismael Zambada Imperial, conocido como “El Mayito Gordo”, es otro de los hijos de Ismael “El Mayo” Zambada. A lo largo de los años, se convirtió en una figura importante del Cártel de Sinaloa, aunque siempre mantuvo un perfil más bajo en comparación con otros miembros de su familia.

El Mayito Gordo fue detenido por las autoridades mexicanas el 12 de noviembre de 2014 en una operación de la Marina en Sinaloa, lo que representó un golpe significativo para el cártel, ya que era uno de los principales operadores logísticos, supervisando el tráfico de drogas y otras actividades ilícitas. Se le acusó de delitos relacionados con el narcotráfico, incluyendo la distribución de cocaína, marihuana y metanfetaminas hacia Estados Unidos. En 2019, fue extraditado a Estados Unidos, donde enfrentó cargos federales por tráfico de drogas.

Tras su extradición, se declaró culpable de varios cargos de tráfico de drogas en una corte federal en San Diego, lo que probablemente buscaba reducir su sentencia a cambio de cooperación con las autoridades estadounidenses. El Mayito Gordo salió de prisión en julio de 2022 y aún cumple cinco años más de libertad condicional.

El Flaco

Serafín Zambada Ortiz, "El Flaco", vive con su familia bajo estricta vigilancia en EEUU. (@crux1469)

Serafín Zambada Ortiz, también conocido como “El Flaco”, es el hijo más joven de El Mayo Zambada. A diferencia de otros miembros de su familia, Serafín nació en San Diego, California, en 1990, lo que le otorga la nacionalidad estadounidense. Hijo de “El Mayo” y la psicóloga Leticia Ortiz Hernández, Serafín creció en un entorno marcado por la guerra del narcotráfico, particularmente por el conflicto entre el Cártel de Sinaloa y los Arellano Félix durante la década de los 90.

Desde pequeño, su vida estuvo ligada a la violencia del narcotráfico. Cuando tenía dos años, un coche bomba explotó cerca de su fiesta de cumpleaños en Culiacán, un evento que llevó a su madre a mudarse con él y su hermana Teresa a Phoenix, Arizona, para protegerlos. En Arizona, Serafín asistió a The Orme School, un exclusivo internado con enfoque en la educación de élite, pero su estancia fue breve, ya que regresó a México al poco tiempo, donde eventualmente se involucraría en las actividades delictivas del Cártel de Sinaloa.

En un intento inicial por mantenerse alejado del negocio familiar, Serafín ingresó a la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) para estudiar Agronomía entre 2011 y 2012. Sin embargo, no terminó sus estudios.

En noviembre de 2013, Serafín fue arrestado en la frontera entre Nogales y Tucson, Arizona. En ese momento, ya era buscado por la Corte del Distrito Sur de California por cargos de narcotráfico. En 2014, se declaró culpable de traficar 500 gramos de cocaína, y en 2018 fue sentenciado a 66 meses de prisión. Recientemente se le vio en una audiencia de su padre realizada en EEUU, país donde actualmente vive bajo una estricta vigilancia.

Los que siguen operando

La guerra por el poder del Cártel de Sinaloa se libra entre La Mayiza y Los Chapitos. (Anayeli Tapia/Infobae)

Entre los hijos de “El Mayo” Zambada, el más destacado que sigue libre es Ismael Zambada Sicairos, conocido como “El Mayito Flaco”, quien ha tomado las riendas de la facción de La Mayiza tras el supuesto secuestro y entrega al gobierno de Estados Unidos. Actualmente enfrenta una guerra contra Los Chapitos.

En el caso de los hijos de “El Chapo” Guzmán, tanto Iván Archivaldo como Jesús Alfredo Guzmán Salazar permanecen libres. Ambos han sido identificados como líderes activos de la facción conocida como “Los Chapitos”, que ha estado involucrada en la lucha por el control del Cártel de Sinaloa, misma que se intensificó tras la caída de El Mayo Zambada.

En cuanto a los hijos de Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, su hija Jessica Johanna Oseguera González fue liberada en Estados Unidos después de cumplir una sentencia relacionada con el lavado de dinero para el CJNG. Jessica fue arrestada en 2020 y, tras su liberación, ha mantenido un bajo perfil.