“Que decida el Senado, no voy a orientar hacia una u otra persona, entiendo que en estos días se abre ya la convocatoria y que decidan las y los senadores”, así fue el deslinde que hizo la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo sobre la reelección de Rosario Piedra Ibarra al frente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), tras solicitarle su opinión sobre el tema.
El emplazamiento
Recientemente las Comisiones Unidas de Derechos Humanos y de Justicia del Senado aprobaron en lo general y lo particular el proyecto de convocatoria para la elección de la persona presidenta de la CNDH para el periodo 2024- 2029, lo cual se publicará en la Gaceta Parlamentaria, en la página electrónica de la Cámara de Senadores, en el Diario Oficial de la Federación (DOF) y en al menos tres diarios de mayor circulación nacional; su actual titular puede ser reelegida.
A partir del día siguiente de la publicación de la convocatoria, a partir de las 9 horas y hasta las 23:59 horas del próximo 15 de octubre, las asociaciones civiles, organizaciones sociales, instituciones académicas y de investigación, colegios de profesionales, organismos públicos, colectivos de derechos humanos y de víctimas, entre otros, podrán postular a candidatos.
Posteriormente, los aspirantes deberán comparecer de manera pública el 24 de octubre, a partir de las 10 horas, ante los y las legisladoras de las comisiones dictaminadoras; finalmente, a más tardar el 8 de noviembre se dará a conocer el resultado, al elegido para encabezarla.
Administración polémica
En septiembre, previo a la toma de posesión, trabajadores de la dependencia enviaron una carta a Sheinbaum Pardo en donde acusaron que en la administración de Piedra Ibarra imperaba el “amiguismo, negligencia, corrupción y pérdida credibilidad (...) es muy lamentable que esto suceda en un organismo autónomo que debiera ser garante de los intereses de las víctimas, los perseguidos, los desparecidos y los marginados en nuestra sociedad”, refiere el documento.
De igual forma acusan a la funcionaria de haber cometido un “despilfarro inmenso de los poco más de mil 798 millones de pesos de presupuesto anual”, aunado a una serie de despidos, “cuando asumió la titularidad de la CNDH encontró una plantilla de mil 720 trabajadores y en sus primeros cuatro años de gestión ha hecho mil 614 despidos lo que significó un costo de 407 millones 263 mil 548 pesos, esto equivale a casi 24 por ciento del presupuesto”, manifestaron los agraviados”.
Y agregaron que tras las destituciones, se tienen “101 juicios laborales por 391 millones 219 mil 188 pesos, que aunado al costo del despido del personal en conjunto representan casi 50 por ciento del presupuesto anual”, explicaron.