De qué está enferma Ifigenia Martínez, la mujer que colocó la banda presidencial a Claudia Sheinbaum

La presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Ifigenia Martínez, de 94 años, hizo un reconocimiento durante la investidura de Claudia Sheinbaum, quien el 1 de octubre se convirtió en la primera presidenta de México. No obstante, debido a su delicado estado de salud, Martínez apenas pudo sostenerse para realizar la entrega de la banda presidencial.

Durante la ceremonia de toma de protesta en San Lázaro, se le vio con un tanque de oxígeno, lo que evidenció las dificultades que enfrenta. Pese al esfuerzo, apenas logró dar su discurso, recibiendo el apoyo del expresidente Andrés Manuel López Obrador quien la sostuvo mientras ella hablaba. “Híjole, apenas me detengo”, comentó.

Ricardo Monreal, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, confirmó que Ifigenia Martínez estaría presente para la entrega de la banda presidencial, a pesar de su delicada salud. “Sí va a estar, está un poco delicada, pero ella va a estar en el momento de la entrega de la banda, de la protesta va a estar”.

Ifigenia Martínez se encuentra en un estado delicado de salud debido a complicaciones asociadas con su edad, según los reportes recientes. Al anunciar su participación, Monreal reconoció que, a pesar de su fragilidad, ella tenía la intención de asistir a San Lázaro para entregar la banda presidencial a Claudia Sheinbaum. Sin embargo, no ofreció detalles sobre los problemas específicos de salud que enfrenta.

Hasta ahora, no se ha proporcionado un diagnóstico concreto sobre la situación de salud de Martínez. No obstante, las imágenes de la ceremonia evidencian que la legisladora atraviesa un serio problema que afecta considerablemente su fortaleza.

Sumado a esto, el pasado 30 de septiembre, Martínez no pudo asistir a una sesión en el Senado lo que se reflejó en su tablero electrónico, que permaneció en blanco por su ausencia, evidenciando el estado relacionado con su bienestar.

“Hoy nos encontramos aquí, en este recinto solemne de la democracia mexicana, como testigos de un momento que marca un antes y un después en nuestra historia: la toma de protesta de la doctora Claudia Sheinbaum Pardo como la primera mujer Presidenta de México.

Su llegada a la Presidencia es la culminación de una lucha que hemos atravesado generaciones enteras de mujeres, quienes con valentía desafiamos los límites de nuestros tiempos. Hoy, junto con ella, llegamos todas y abrimos paso a una nueva era.

Yo misma, que he recorrido tantas batallas por la democracia y la justicia, me siento profundamente honrada de presenciar este triunfo histórico. En 1969, formé parte de la Corriente Democrática de izquierda en México, una lucha que, junto a muchas y muchos, iniciamos con la firme convicción de que el cambio verdadero era posible.

[...] Hoy, más que nunca, necesitamos tender puentes entre todas las fuerzas políticas, dialogar sobre nuestras divergencias y construir, juntas y juntos, un país más justo y solidario. Es tiempo de altura de miras. Es tiempo de construir nuevos horizontes y realidades. Es tiempo de mujeres. Sigamos dejando huella”.