“Engañó a millones de mexicanos”; Eugenio Derbez y otros famosos que terminaron decepcionados de AMLO y su 4T

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) concluye su sexenio con una aprobación que roza el 80%, según datos de la encuestadora Enkoll. Su aceptación se sostiene por los programas sociales que impulsó durante su gestión, de acuerdo con el reporte de la agencia dedicada a la investigación en opinión pública y estudios de mercado.

Sin embargo, la popularidad de AMLO es una de varias piezas que integran el ocaso de su mandato. El tabasqueño deja el poder con una enorme aceptación, pero también en medio de una crisis de seguridad en Sinaloa y otras localidades, división por la Reforma al Poder Judicial y el descrédito de grupos sociales cuya calidad de vida no mejoró durante “el primer piso de la Cuarta Transformación”, como definió su administración.

Muchas de esas voces críticas han sido celebridades que rompieron con la administración de AMLO en algún punto de su mandato. Eugenio Derbez, Joaquín Cosío, Gael García Bernal, Kate del Castillo, Rubén Albarrán, Susana Zabaleta, Eduardo España, Laura Zapata, Laisha Wilkins y Natalia Lafourcade, por mencionar a algunas, externaron públicamente diferencias con las políticas públicas promovidas por López Obrador, o su desencanto con su movimiento. Algunos, como Cosío, Wilkins, Zapata y España, se convirtieron en voces sumamente críticas.

Contra todo pronóstico, Eugenio Derbez se convirtió en uno de los opositores más notables de AMLO al promover y participar en la campaña ‘Sélvame del Tren’, la cual buscaba detener el proyecto del Tren Maya por su potencial daño ambiental. Aunque Derbez no fue el único famoso que participó en el movimiento, el actor se convirtió en el rostro más visible de la campaña, con la suficiente fuerza como para que la oposición viera en él a un candidato para evitar un segundo sexenio de Morena.

‘Sélvame del Tren’ fue un punto de quiebre entre el mandatario y varias celebridades que en 2018 externaron su afinidad a su proyecto de nación. Al igual que Derbez, Kate del Castillo reaccionó a los señalamientos hechos por el presidente en ‘La Mañanera’: “No estamos en contra de nadie, ni atacando a nadie. Estamos preocupados por el daño que puede causar el tren maya. Nadie me está pagando. Que AMLO escuche a los ambientalistas para ver qué hacemos por la selva. Tengo derecho a cambiar de opinión, después de votar por AMLO”.

A Kate Del Castillo se sumó la cantautora Natalia Lafourcade, quien negó formar parte de una campaña contra el presidente. “Es importante que sepan que nadie, ni persona física, ni compañía, ni organización política, me ha pagado o motivado de ninguna manera para expresa mi opinión y preocupación ante este tema”, escribió en su cuenta de Instagram.

‘Sélvame del Tren’ no impidió la construcción del Tren Maya, un desacierto para el actor Gael García Bernal, quien definió como decepcionante la administración de AMLO en temas ambientales.

Durante una charla con la periodista Adela Micha, García Bernal expuso su desencanto hacia la llamada 4T: “El gobierno de México está en dirección contraria, nos vamos a quedar muy rezagados. Pemex está obsoleto. Esperaba mucho más el gobierno encabezado Andrés Manuel López Obrador, debido a que a pesar de los cambios que prometió, muchas dinámicas no cambiaron del todo.

Pero siento que también era lo que, creo, convenía como para cambiar un poco la dinámica en que estábamos; desgraciadamente muchas dinámicas no cambiaron del todo, no tanto como se esperaba”, expuso el actor.

Joaquín Cosío fue más frontal. El actor se destacó como un opositor a la estrategia de seguridad de AMLO. En entrevista con el periodista Fernando Del Collado, Cosío hizo un reclamo que hizo eco en redes sociales: “Los muertos de este sexenio deberían visitar a AMLO en sus pesadillas”.

Cosío afirmó que en México se mataba porque se podía y esa estela de sangre era “la huella de la indiferencia de la autoridad”.

Con la misma intensidad, Eduardo España y la cantante Susana Zabaleta mostraron su desencanto con al 4T; mientras las actrices Laura Zapata y Laisha Wilkins se convirtieron en referentes de la oposición a Andrés Manuel López Obrador.

En junio de 2021, Eduardo España lanzó una dura crítica contra el mandatario, a quien definió como un tipo “engreído”, “estúpido” y “corrupto”. Sus señalamientos lo llevaron a enfrascarse en una pelea con simpatizantes del presidente. “No sé cómo hacerles entender a los seres que, con una ortografía espeluznante y una redacción de dar vergüenza, siguen aferrados a defender a un ser estúpido. En fin”, escribió el actor, quien se dijo arrepentido de haber votado por López Obrador.

Susana Zabaleta fue otra artista que públicamente declaró estar decepcionada de la administración de López Obrador, a quien le creyó cada una de sus promesas de campaña: “Sí conocía a López Obrador, diciendo: “Hola, ¿Cómo están?”, recorriendo nuestro país, partiéndose la madre porque el señor sí se partió la madre (...) Si no fue de gratis, a mí me embaucó con el rollo de todo va a estar increíble, vamos a ayudar a los pobres, ya no va a haber pobreza”, dijo en entrevista para Atypical te ve.

Laura Zapata, actriz que encarnó a las villanas más icónicas de los años 90, asumió un rol sumamente crítico contra el político tabasqueño. Durante las pasadas elecciones presidenciales, se volvió un referente de la oposición y a la fecha es pieza clave de Atypical te ve, plataforma del publicista Carlos Alazraki que se ha erigido como una canal crítico contra la 4T.

Laisha Wilkins, actriz que alcanzó la fama a finales de los años 90 y principios de la década del 2000 por telenovelas de corte juvenil, se convirtió en opositora de AMLO, al grado de que varios de sus tuits fueran expuestos en más de una ‘Mañanera’. En vísperas del cambio de gobierno, Wilkins ha recurrido a la red social X para hacer duras críticas hacia el presidente y a sus políticas públicas.

En una reciente publicación, Laisha Wilkins hizo una de sus últimas críticas a Andrés Manuel López Obrador: “Queda una mañanera de quien con su discurso engañó a millones de mexicanos. Mintió e injurió a periodistas, a ciudadanos y hasta a países. Jugó con su retórica y sus simbolismos; se carcajeó de las masacres, se burló de México entero, pero, al parecer, ya se va a la chingada”.

Semanas antes, Laisha Wilkins había acaparado titulares por definir la aprobación de la Reforma Judicial como el inicio de una dictadura en el país: “Es el peor día para México de todo el sexenio, y de varios, si no es que de la historia moderna. No tienen idea de las consecuencias. Sin contrapesos, militarización, sin certeza jurídica, sin inversión, pero sobre todo, sin Estado de Derecho”, escribió la actriz, quien tampoco alberga esperanzas por la visión continuista que anunció Claudia Sheinbaum.