40 balazos: el castigo que recibió el Cheyo Ántrax por traicionar al Mayo Zambada

Al menos tres de los 40 balazos que dispararon contra El Cheyo Ántrax impactaron en su rostro. Su nombre era Eliseo Imperial Castro, era considerado uno de los últimos líderes de Los Ántrax, el brazo armado que hizo famoso “El Chino Ántrax”; era sobrino de Ismael El Mayo Zambada, quien presuntamente ordenó matarlo la tarde del pasado 30 de mayo.

Junto a la camioneta donde quedó el cuerpo del Cheyo Ántrax -con el rostro ensangrentado y recargado en el asiento del conductor- las autoridades recogieron cerca de 40 casquillos percutidos de cuernos de chivo, una de las armas predilectas de los grupos criminales.

El asesinato del Cheyo Ántrax se atribuyó en un principio a la disputa que mantenían Los Chapitos contra la facción del Cártel de Sinaloa comandada por El Mayo Zambada, previo a su detención de este último el 25 de julio y el estallido de la guerra el 9 de septiembre.

Incluso después de la detención del exlíder del Cártel de Sinaloa algunos analistas consideraron que el asesinato de Eliseo Imperial Castro correspondía a una “violencia quirúrgica” que derivó en la presunta traición de Los Chapitos al Mayo Zambada. Sin embargo, las autoridades de Estados Unidos revelaron otra versión muy distinta.

Un día antes de la primera audiencia del Mayo Zambada en la Corte de Distrito Este de Nueva York, el periodista Keegan Hamilton difundió un documento oficial enviado por el fiscal Breo Peace al juez Brian Cogan:

En el documento se lee que El Mayo Zambada se enteró que su sobrino El Cheyo Ántrax estaba presuntamente cobrando deudas a nombre de su tío y sin su autorización, por lo que “El Señor del Sombrero” ordenó matarlo dos meses antes de su captura.

A lo largo de su trayectoria criminal, El Cheyo Ántrax siempre se mantuvo cercano a la familia Zambada García, se le dejó ver en varias fotografías con sus primos, Vicentillo, Mayito Flaco y Mayito Gordo; de éste último se convirtió en su escolta personal hasta que lo detuvieron en noviembre de 2014.

Se presume que El Cheyo Ántrax tomó el mando del brazo armado formado por El Mayo Zambada en 2008 después del asesinato de José Rodrigo Aréchiga Gamboa (El Chino Ántrax) en mayo de 2020, luego de que se escapó de la libertad condicional que tenía en San Diego, California, y viajara a Sinaloa.

La periodista Anabel Hernández aseguró que fue el propio Mayo Zambada quien traicionó al Chino Ántrax y lo entregó a la justicia de Estados Unidos en 2013. Según algunas versiones, Aréchiga Gamboa viajó a Sinaloa con un GPS, pidió reunirse con El Mayo para revelar su ubicación; sin embargo, “El Señor del Sombrero” descubrió el plan y decidió asesinarlo. Junto al Chino Ántrax cayeron su hermana y su cuñado.

Testimonios recogidos por el periodista Carlos Álvarez Acevedo refieren que minutos antes de las 15:00 horas del 30 de mayo dos vehículos circulaban a toda velocidad por la Carretera 15, a la altura de Jardines del Humaya.

Los asesinos del Cheyo Ántrax impactaron su camioneta en el cofre, puertas y parabrisas, lo que obligó al sobrino del Mayo Zambada a bajar la velocidad y detenerse junto al camino; tuvieron tiempo de bajar y dispararle en la cabeza antes de que las sirenas de la policía llegaran a la zona.