¿Quién es Poncho Limón, estratega del Mayo Zambada, y cuál sería su papel en la guerra con Los Chapitos?

Más de un mes después de la captura de Ismael “El Mayo” Zambada en Estados Unidos, la lucha por el control total del Cártel de Sinaloa ha llegado a un punto álgido desencadenando una feroz guerra entre dos facciones, principalmente en Culiacán y sus alrededores.

Por un lado están Los Chapitos, liderados por Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, hijos de Joaquín El Chapo Guzmán quienes todavía se encuentran en libertad tras la detención de Ovidio y la entrega de Joaquín Guzmán López. Por otro lado está La Mayiza, dirigida por Ismael Zambada Sicairos, mejor conocido como El Mayito Flaco, quien busca vengar la traición sufrida por su padre.

En este complejo panorama de poder y violencia, Alfonso Limón Sánchez, conocido como Poncho Limón, juega un rol crucial. Este líder criminal, quien ha sido socio estratégico de El Mayo Zambada desde 2007, ha ganado relevancia en el conflicto y sería crucial para La Mayiza.

Según Anabel Hernández, reconocida periodista y autora de investigaciones sobre narcotráfico, Limón Sánchez es uno de los más destacados traficantes de drogas a Estados Unidos y otros países, por lo que posee los suficientes recursos como para pagar a sicarios que peleen por la familia Zambada.

“No olvidemos que en esta guerra quienes tienen la mayor fuerza y poder de fuego son Los Chapitos, el control predominante de Culiacán ha estado en la anuencia del gobernador Rubén Rocha Moya y de todas las autoridades federales. Estamos hablando de una guerra desigual. La información que yo tengo hasta este momento ha sido que todas las acciones que han realizado los Zambada han sido de defensa, no de ataque”, dijo la investigadora en el más reciente episodio de su podcast Narcosistema.

En ese mismo capítulo titulado “Amenazan de muerte al Mayo Zambada”, la periodista compartió un audio de un presunto sicario en donde supuestamente menciona que Poncho Limón está del lado de La Mayiza.

“[....] Parece ser que se juntaron Los Rusos, Ponchito el de Lima con El Chapito Isidro (Guasave), van a apoyar al Mayito Flaco con todo, desde hoy empieza, viejo. Todo lo que huela a Chapo no se le arrimen porque van a estar buenos los costalazos. Viene apoyado ruso, los hermanos Arzates, el rana, el Aquiles con todo”, se escucha.

La madrugada del 16 de marzo de 2017, los barrotes del penal de Aguaruto, en Culiacán, fueron testigos de la fuga de cinco presos de alto perfil vinculados al Cártel de Sinaloa. Entre ellos se encontraba Alfonso Limón Sánchez, alias “Poncho Limón”, considerado uno de los sicarios en los que más confiaba Ismael El Mayo Zambada.

Alfonso Limón, nacido en la comunidad de La Apona en 1972, había sido detenido en noviembre de 2014 en una residencia del fraccionamiento privado Privada Pueblo Bonito, en el Desarrollo Tres Ríos de Culiacán. La operación que llevó a su detención, denominada “Narco Polo”, fue coordinada por la Agencia Antidrogas estadounidense (DEA) y la Secretaría de Marina (Semar) de México. Al momento de su arresto, las autoridades lo trasladaron al Penal de Puente Grande, en Jalisco, aunque su defensa interpuso recursos legales para que fuera trasladado al penal de Culiacán.

Desde esa prisión, “Poncho Limón” luchó en los tribunales contra su extradición a Estados Unidos, donde la DEA y la Fiscalía de San Diego lo señalaban como uno de los principales coordinadores de trasiego de drogas. En agosto de 2016, el gobierno mexicano otorgó la extradición de Limón, pero un recurso legal detuvo el traslado. Siete meses más tarde, en plena guerra entre “Los Chapitos” y “Los Dámaso”, se produjo su fuga.

La fuga del 16 de marzo de 2017 no solo incluyó a Limón Sánchez, sino también a Juan José Esparragoza Monzón “El Negro”, hijo de El Azul Esparragoza; Jesús Peña González alias “El 20″; Francisco Javier Zazueta Rosas, “El Pancho Chimal”; y Rafael Guadalupe Félix Núñez alias “El Changuito Ántrax”. El escape agrandó la fisura entre las facciones del Cártel de Sinaloa luego de la caída definitiva de Joaquín “El Chapo” Guzmán.

Según un informe, los reclusos del penal de Aguaruto gozaban de lujos incluyendo televisores inteligentes, sillones, sistemas de sonido, aire climatizado y más. Las autoridades descubrieron un millón de pesos en efectivo, armas largas y cortas, gallos de pelea, latas de cerveza, y bolsas con varios kilos de marihuana. Durante el operativo policial, se encontraron chalecos antibalas, porta armas, porta esposas, calcomanías con las iniciales JGL y “tablas” para infringir castigos corporales.

La revisión de los módulos, liderada por el teniente coronel Cristóbal Castañeda Murillo, sacó a relucir el tipo de vida que llevaban los criminales dentro del penal. Además de las armas y drogas, los agentes encontraron artículos con la imagen de Guzmán Loera y San Judas Tadeo, patrono de las causas perdidas.

En medio de esta operación, el jefe de seguridad del penal de Aguaruto fue removido de su cargo y sometido a investigación por la Fiscalía de Sinaloa y la Fiscalía General de la República (FGR).

Desde su escape, “Poncho Limón” ha escalado posiciones dentro de la organización criminal, consolidándose como uno de los hombres de máxima confianza del “Mayo” Zambada y aliándose con figuras como “El Mayito Flaco”, en la estructura del Cártel de Sinaloa. En su momento, se llegó a decir que su poder era tal que fue considerado uno de sus posibles sucesores.