Cosas que no debes hacer cuando te invitan a una boda, según las reglas de etiqueta

A los anfitriones les toma bastante tiempo organizar un día tan especial como es el de su boda, es por ello que debes de cuidar tu comportamiento cuando eres invitado ya que no quieres arruinar esta celebración que recordarán por el resto de sus vidas.

El festejo de boda ha existido en occidente desde hace décadas, este rito se realiza cuando dos personas desean unir sus vidas para comenzar el matrimonio, la ceremonia formaliza la relación de la pareja, si deseas ser el invitado honorable uno de los puntos esenciales es seguir el código de vestimenta muchas veces estos están escritos desde la invitación para el evento.

Si quieres disfrutar todo el evento que los anfitriones prepararon acude con tiempo al festejo, sería de muy mal gusto retirarse a la mitad de la fiesta. No quieres ser recordado como la persona que abandonó a los invitados en uno de los mejores días de los novios.

Los invitados de bodas son uno de los puntos esenciales del festejo, ya que sin ellos no se crearían buenos recuerdos los asisten familiares, amigos, compañeros de trabajo, así como las personas importantes para los novios, por eso es lo mejor comportarse de manera correcta.

• No llegues tarde a la ceremonia civil o religiosa ya que un buen invitado contempla sus tiempos con anticipación para llegar puntual.
• No obstruyas la visión del camarógrafo cuando se encuentre grabando el primer baile de los novios en la pista, su trabajo es capturar los mejores momentos del evento, permítele crear los recuerdos para los novios.
• No uses el color blanco ya que esta es una norma de etiqueta obligatoria, al menos que el código de vestimenta sea distinto.
• No te excedas de tragos si no quieres causar algún descontento durante el evento.
• No lleves a otras personas que no fueron invitadas, ya que los novios invirtieron bastante tiempo en planear todo su día especial seleccionaron hasta el más mínimo detalle así como las personas que asistirán a la celebración.
• No improvisar el discurso de bodas, si eres la persona encargada de hablar ante todos los invitados, procura planear con tiempo lo que dirás porque todas las personas estarán esperando este momento tan memorable. No quieres causar el ridículo si te trabas al hablar o no sabes que decir, es mejor tener un escrito previo del discurso.
• No trates mal a los meseros, ellos solamente hacen su trabajo, si bien pueden ocurrir accidentes al momento de servir la mesa, procura ser empático ante la situación.
• No ocasiones disgustos entre los invitados, pues bien pueden existir disgustos previos entre los asistentes, procura crear un ambiente cómodo para todos, lo que suceda en la fiesta de bodas serán recuerdos memorables para los novios.
• No te quejes de la comida porque el menú es una de las cosas principales que planean los anfitriones desde el primer momento, procura disfrutar de los platillos. Si tu alimentación es distinta de la carta principal puedes preguntar con amabilidad a los meseros si cuentan con otra selección de platillos para ti, regularmente existe una selección de comida para niños y puede que se acople a tu dieta.

• Puedes comprar el regalo con anticipación para causarle una buena impresión a los anfitriones. En la mayoría de las bodas existe una lista de presentes, selecciona uno de ellos si no tienes idea de que comprar.
• Participa en las actividades de la boda, un buen invitado rara vez permanece sentado en su mesa, los novios planearon el itinerario para todo el día, demuéstrales que tienes la disposición de disfrutar el evento.
• Avisar con anticipación que no podrás asistir, si bien existen muchos motivos por los cuales puede ser casi imposible asistir a la boda y tienes conocimiento de ello desde días antes, avísale a los invitados ya que ellos contemplan el número de personas para todo el cronograma de la fiesta.

Si bien los novios son el centro de la fiesta, recuerda no acapararlos ya que no eres el único invitado, todos los asistentes están en la celebración por la misma razón que tú, puedes entablar conversación con más personas o acudir a las actividades recreativas que muchas veces planean los anfitriones.