Cártel de Sinaloa muda laboratorios de fentanilo a Canadá; así operan

En octubre de 2023, Los Chapitos desplegaron narcomantas en Culiacán y otras localidades de Sinaloa, anunciando la prohibición de la venta, fabricación y transporte de fentanilo, un opioide sintético que ha causado una crisis de salud en Estados Unidos debido a las sobredosis.

Las mantas también advertían de la venta o comercialización de precursores químicos necesarios para producir la droga. El mensaje, atribuido a Iván Archivaldo, Jesús Alfredo y Joaquín Guzmán, hijos del narcotraficante Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, decía: “Nunca hemos sido ni seremos afines a ese negocio. Aténgase a las consecuencias”.

Con estas advertencias, esta facción del Cártel de Sinaloa se distanciaba de la fabricación y tráfico de fentanilo, a pesar de que este negocio es uno de sus más rentables y los ha convertido en objetivos prioritarios para Estados Unidos.

Casi un año después de estos anuncios, han comenzado a surgir informes sobre la reubicación de los laboratorios clandestinos que producen esta mortal droga sintética.

Katarina Szulc, periodista independiente, ha revelado que Canadá se ha convertido en la nueva zona cero para la producción de fentanilo gracias a la infiltración de los cárteles mexicanos, específicamente el Cártel de Sinaloa.

Szulc asegura que el Cártel de Sinaloa ha enviado a sus operadores dentro de Canadá, en estados vecinos de Estados Unidos, aumentando así la eficiencia del tráfico y la producción. “Envían a gente de Sinaloa a Canadá, cerca de los estados norteamericanos a los que el cártel intenta llegar. Eso hace que el tráfico sea más fácil y cercano”, señaló.

Desde hace cinco años, miembros del Cártel de Sinaloa, en particular Los Chapitos, se han asentado en la costa oeste de Canadá para manejar laboratorios y grandes operaciones de tráfico de drogas. Katarina Szulc recuerda: “Los cárteles mexicanos se han infiltrado por completo en el tráfico de drogas canadiense sin tener que cruzar ninguna frontera”.

Katarina Szulc, excolaboradora de CBC, explica que la diáspora mexicana en Vancouver es cada vez más evidente, señalando su residencia de toda la vida en esa ciudad. A pesar de la presencia y actividad de bandas locales como Brothers Keepers, Red Scorpion y Hells Angels, la influencia de los cárteles mexicanos había sido subestimada hasta ahora.

Los narcotraficantes asiáticos locales también juegan un papel significativo en esta cadena de producción y tráfico de fentanilo.

Katarina Szulc comenta que estos proveedores, principalmente de ascendencia china y vietnamita, “ayudan a conseguir los precursores, trayéndolos desde Asia y suministrándolos a los laboratorios dirigidos por los cárteles mexicanos para producir el fentanilo”.

“Ya tengo 4 años trabajando: recojo las cosas, cuando me las mandan verifico que todo esté bien, soy un distribuidor por así decirlo, no vendo al menudeo, sólo al por mayor. Se está poniendo un poco peligroso el tema porque están haciendo pastillas aquí y ahora y eso atrae más gobierno. Mandaron gente desde Sinaloa a hacerlo aquí, más cerca de los estados a los que quieren llegar y los asiáticos aquí consiguen los químicos”, le dijo uno de los operadores del narcolaboratorio en entrevista.

La Agencia de Salud Pública de Canadá informó que aproximadamente 44 mil 600 canadienses murieron por sobredosis de drogas tóxicas entre 2016 y 2023, con el fentanilo implicado en el 80% de las 8 mil muertes por sobredosis registradas en 2023.

“El fentanilo es tan fácil de preparar que un profesor de química de secundaria probablemente podría prepararlo en su cocina”, compartió una fuente de Szulc.

Las redadas a gran escala en laboratorios clandestinos son cada vez más comunes en Canadá. Una intervención reciente en Drummondville, Quebec, resultó en la incautación de cientos de miles de píldoras falsificadas que contenían potentes opioides sintéticos.

A pesar de las operaciones policiales, la mayoría de las veces no se revelan más detalles sobre los responsables. Según Katarina Szulc, un artículo reciente de CBC insinuó que los Hells Angels estaban detrás de ciertos laboratorios, pero sus fuentes aseguran que el Cártel de Sinaloa es el verdadero responsable de los superlaboratorios y de la mayor parte del fentanilo en las calles canadienses. “Hasta ahora, han estado manteniéndose discretos, bajo el radar”, dijo.

Un exoficial de policía de Vancouver con más de dos décadas de servicio corroboró su información. “Es un negocio y el objetivo es ganar dinero. Las personas involucradas encontrarán una manera de aumentar las ganancias y reducir los costos y los riesgos. Fabricarlo aquí cumple con todos esos requisitos”, declaró a Szulc.

En East Hastings Street, en Vancouver, la comunidad lucha contra los efectos devastadores del aumento del fentanilo. Katarina Szulc informó cómo una tienda privada en esta calle ofrece pruebas de detección de drogas gratuitas con resultados el mismo día.

La producción local de fentanilo, alimentada por la infraestructura y el control de los cárteles mexicanos, está transformando el panorama del tráfico de drogas en Canadá y exacerbando la crisis de salud pública.