Andrómeda, también es conocida como Messier 31, M31, o NGC 224, su esplendor es indiscutible, una galaxia espiral situada a unos 2.5 millones de años luz de distancia, es fácil de distinguir entre el cúmulo de estrellas que se disponen en el cielo desde la Tierra.

Parece una nube alargada y extraña, conformada por 1 billón de estrellas extendidas en un diámetro de casi 200 mil años luz, más grande que la Vía Láctea.

M31 es visible al ojo humano, aunque solo podemos ver el brillo del centro interno. La galaxia entera está rotando en el espacio, con las partes inferiores acercándose mientras la partes inferiores retroceden.

La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), sugiere que para poder observar la galaxia aconseja realizar lo siguiente:

• Buscar un lugar despejado por la noche y esperar entre 30 y 45 minutos para que el ojo se acostumbre a la oscuridad del cielo.
• La condición más propicia es una noche de luna nueva junto a un cielo oscuro.
• Mirar hacia el noroeste y buscar el gran cuadrante de Pegaso (un conjunto de estrellas que conforman un cuadrado), desde ahí se pueden observar tres estrellas brillantes dispuestas en una línea larga que se curva a lo largo del cielo desde el oeste hasta el este. Estas son parte integral de la constelación de Andrómeda.
• Para localizarla en plenitud es necesario mirar hacia el norte desde el punto central de estas tres estrellas. En esta dirección se verá un segundo objeto celeste que traza una línea ligeramente curva en el cielo. En las cercanías de esta segunda estrella se localiza.

Durante los meses de agosto y septiembre, Andrómeda se encontrará en su punto más alto, lo que facilitará su observación. Si no se está familiarizado con la astronomía, se pueden usar aplicaciones de observación de estrellas.

De igual modo, para mirarla se puede hacer uso de binoculares o con pequeños telescopios.