Cuánta espirulina es posible consumir sin tener efectos contraproducentes

A pesar de sus beneficios es importante tomar la dosis correcta para evitar reacciones adversas

La espirulina se ha convertido es un suplemento popular (Imagen ilustrativa Infobae)

Como hemos mencionado antes la espirulina es una cianobacteria que ha ganado popularidad como suplemento dietético debido a su perfil nutricional y beneficios para la salud. Se cultiva principalmente en agua dulce y está disponible en forma de polvo, tabletas, cápsulas y extractos.

Aproximadamente el 60-70% de su peso seco es proteína, incluyendo todos los aminoácidos esenciales y además es abundante en vitaminas del grupo B, como B1 (tiamina), B2 (riboflavina), B3 (niacina), B6 y B12, vitamina C y vitamina E. Por su parte, este alimento también es alto en hierro, calcio, magnesio, fósforo y potasio y rico en compuestos como ficocianina, betacaroteno, y otros carotenoides.

Es por todas estas razones que la espirulina ha cobrado relevancia y popularidad en la actualidad; sin embargo, es importante tener precaución con la dosis y la forma de consumo para evitar efectos adversos.

Su consumo aporta una gran cantidad de nutrientes como vitaminas y minerales (Imagen ilustrativa Infobae)

Cuánta espirulina es saludable tomar

A pesar de que la espirulina es un suplemento ampliamente utilizado y generalmente considerado seguro es importante consumir la cantidad de espirulina adecuada según tu edad, sexo y estilo de vida. Razón por la cual te decimos cuáles son algunas consideraciones que debes tener para ingerirla:

  • Dosis Recomendada:
    Para adultos, una dosis comúnmente recomendada de espirulina es de 1 a 3 gramos por día. En este sentido, es importante mencionar que existen personas que pueden consumir hasta 10 gramos diarios, lo cual se considera la dosis máxima segura; sin embargo dicho consumo requiere asesoría médica especializada y es casi exclusiva para deportistas de alto rendimiento que requieren más nutrientes que una persona normal.
  • Inicio Gradual: Para quienes empiezan a tomar espirulina, es aconsejable comenzar con una dosis más baja (alrededor de 1 gramo por día) y aumentar gradualmente hasta la dosis deseada. Esto permite al cuerpo adaptarse y reduce el riesgo de efectos secundarios.
  • Consultas Médicas:
    Es fundamental consultar con un médico antes de comenzar a tomar espirulina, especialmente si se tienen condiciones médicas preexistentes, como enfermedades autoinmunes, fenilcetonuria, problemas renales, o si se está embarazada o amamantando. Un profesional de la salud podrá ofrecer una recomendación personalizada sobre la dosis adecuada.
  • Efectos Secundarios: Aunque la espirulina es segura para la mayoría, puede causar efectos secundarios en algunas personas, como náuseas, dolor de cabeza, reacciones alérgicas o problemas digestivos. Si se experimentan estos síntomas, lo mejor es reducir la dosis o dejar de tomarla y consultar a un médico.
  • Calidad del Producto: Asegúrate de consumir espirulina de alta calidad y de fuentes confiables. La espirulina de mala calidad puede contener toxinas, metales pesados o contaminantes que pueden ser perjudiciales.
  • Evitar Excesos: Consumir más de la dosis recomendada no necesariamente aporta mayores beneficios y puede aumentar el riesgo de efectos adversos. Es mejor quedarse dentro de los límites sugeridos y seguir las instrucciones del fabricante y las recomendaciones médicas.

En resumen, una dosis común y segura de espirulina es de 1 a 3 gramos por día para la mayoría de las personas, aunque se puede llegar a consumir hasta 10 gramos bajo supervisión médica. Siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier suplemento.

Los atletas de alto rendimiento suelen consumir dosis más elevadas de este suplemento para poder tener el rendimiento adecuado (Imagen ilustrativa Infobae)

Cuáles son los beneficios de consumir espirulina

  • Mejora del Sistema Inmunológico: Estimula la producción de anticuerpos y otras células necesarias para la respuesta inmune.
  • Propiedades Antioxidantes y Anti-inflamatorias: La ficocianina y otros antioxidantes ayudan a combatir el daño oxidativo y reducir la inflamación.
  • Regulación del Colesterol y Glucosa en Sangre: Puede ayudar a disminuir el colesterol LDL (malo) y aumentar el HDL (bueno), así como estabilizar los niveles de azúcar en sangre.
  • Aumento de Energía y Reducción de Fatiga: Los nutrientes densos proporcionan energía y pueden ayudar a combatir la fatiga.
  • Desintoxicación: Ayuda a eliminar toxinas del cuerpo, incluidos metales pesados.
  • Apoyo Digestivo: Actúa como prebiótico, alimentando a la flora intestinal beneficiosa.
  • Salud Cognitiva y Mental: Los nutrientes como el magnesio y las vitaminas B apoyan la función cerebral y pueden mejorar el estado de ánimo.
Su consumo ayuda a reducir la fatiga e incrementar el rendimiento en personas que realizan ejercicio (Imagen ilustrativa Infobae)

Así que ya lo sabes, no dudes en incluir este suplemento en tu dieta para obtener muchos beneficios; de preferencia pregunta a tu especialista de salud sobre la dosis recomendada para ti de acuerdo con tu estilo de vida. En caso de empezar a tomarla siempre se recomienda iniciar con la dosis más baja, de una cucharada.