Los malestares estomacales y gases son muy comunes en la sociedad mexicana debido al estilo de vida y alimentación que abunda en la población. Estos se pueden combatir con tratamientos médicos, no obstante, también se pueden reforzar con un té de anís, pues sus propiedades ayudan a regular el sistema digestivo.
Se trata de una planta que aporta calcio, fósforo, zinc, magnesio y potasio, así como vitaminas de los grupos A, B y C.
Además de sus propiedades aromáticas, esta planta sirve para combatir problemas respiratorios, reducir cólicos y quitar los nervios. Sin embargo, es importante considerar que no se puede consumir con frecuencia, pues puede convertirse en algo tóxico.
Tipos de anís y sus propiedades
A continuación te contamos cuáles son los tipos de anís que existen y para qué sirven:
- Anís Verde: también conocido como anís común, es una variedad data desde la época de los faraones. Se usa principalmente con fines medicinales para tratar la acidez e indigestión. Además, se incluye en la elaboración de cosméticos y perfumes.
- Anís Estrellado: Originario de Asia, se distingue por su forma estrellada. Este anís se emplea medicinalmente para aliviar gases estomacales, indigestión y diarrea. Es considerado de alta calidad, con un sabor suave y ligeramente dulce, y es popular en la preparación de infusiones y postres.
- Anís Japonés: Poco conocido debido a los riesgos asociados con su consumo, este anís es tóxico y puede causar inflamaciones en las vías urinarias y los riñones. Por estas razones, su consumo no es recomendable.
- Anís de Florencia: Originario del Mediterráneo, esta variedad es comúnmente conocida como hinojo. Muy apreciado en la cocina, especialmente en platillos salados, el anís de Florencia goza de gran aceptación gastronómica.
Té de anís contra los gases
Ingredientes:
- 1 estrella de anís
- Agua
- 1 vara de canela
- Endulzante al gusto
Preparación:
- Vierte dos tazas de agua en una olla
- Agrega una estrella de anís
- Agrega una vara de canela
- Calienta la mezcla a fuego medio-alto hasta que alcance el punto de ebullición
- Una vez que hierva, retira la olla del fuego
- Deja reposar el té durante cinco minutos para que los sabores se intensifiquen
- Cuela la mezcla para eliminar los sólidos
- Sirve caliente y, si lo prefieres, endulza al gusto
Recuerda disfrutar esta bebida con moderación y consultar a un médica si las molestias persisten, pues pueden estar relacionadas con una enfermedad.