¿Alguna vez te has preguntado de dónde provienen las papas que se convierten en las crujientes y populares Sabritas? A continuación te decimos dónde se cosechan estos tubérculos que posteriormente se transforman en una de las botanas más populares en México.
Quién es el dueño de Sabritas
Fundada en 1943 por Pedro Marcos Noriega y su esposa Guadalupe, Sabritas comenzó como una pequeña empresa de botanas caseras distribuidas en bicicleta. La creciente demanda llevó a la expansión de su negocio, y menos de una década después, abrieron una fábrica bajo el nombre “Golosinas y Productos Selectos”.
Entre sus productos iniciales destacaban las papas y los muéganos, todos elaborados artesanalmente.
El nombre “Sabritas”, combinación de las palabras “sabrosas” y “fritas”, fue sugerido por Guillermo Noriega, hijo de los fundadores, y se convirtió en un elemento clave para la identidad de la marca. En 1963, Guillermo tomó las riendas del negocio tras el fallecimiento de su padre y expandió su distribución a varios estados del país. En 1965, PepsiCo adquirió la marca, manteniendo su nombre y su identidad local.
Actualmente, Sabritas opera en 15 instalaciones de PepsiCo en México y distribuye sus productos a través de 300 rutas en todo el territorio nacional. La empresa se ha diversificado, lanzando la marca Sonrics en 1985 y ampliando su oferta con botanas como Cheetos, Doritos, Ruffles y Fritos.
En 2005, introdujo la línea flaming hot, inicialmente con los Cheetos, y posteriormente la expandió a otros productos como Doritos, Ruffles y Sabritas clásicas en 2009.
¿De dónde son las papas con las que se hacen las Sabritas?
De acuerdo con la información oficial de Sabritas compartida a través de un reciente comunicado, las papas de la marca vienen del Centro de Desarrollo Agrícola Sabritas (CDAS), el cual está ubicado en Toluca, Estado de México.
En un recorrido a este sitio que está en el canal de Youtube de PepsiCo se menciona que en el lugar se reproducen y crecen plántulas de forma 100% natural y después son mandadas a invernaderos para que se desarrollen de forma adecuada.
Las papas son expuestas a las luz para que puedan tener una cáscara más gruesa y en el proceso de almacenaje permanecen en refrigeración de tres a seis meses. Luego de este proceso es que se llevan al campo para ser sembradas y cosechadas.
En este sentido, las papas son enviadas a Tapalpa, Jalisco; Los Mochis, Sinaloa; Caborca y Ciudad Obregón, Sonora; Nuevo Casas Grandes, Chihuahua; Galeana y Aramberri, Nuevo León, y Arteaga, Coahuila, para que terminen su proceso de crecimiento y estén listas para ser transformadas en botanas.