La sal es un compuesto químico que se compone de cloro y sodio, que se caracteriza por su sabor, al que llamamos salado.
Es indispensable para la vida, pero en su justa medida.
Los peligros
- Casi todos los grupos de población en el mundo la consumen en exceso.
- Actualmente en adultos, la ingesta media mundial es de 4 mil 310 mg/día, más del doble de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es de menos de 2 mil mg/día, equivalente a menos de 5 g/día de sal.
- El principal efecto sobre la salud asociado con las dietas altas en sal es el aumento de la tensión arterial, lo cual incrementa el riesgo de: enfermedades cardiovasculares, cáncer gástrico, obesidad, osteoporosis, síndrome de Ménière, entre otras enfermedades renales.
- Se calcula que 1.89 millones de muertes al año están asociadas con el consumo desmedido.
- Reducir su ingesta es una de las medidas de mejor costo-beneficio eficaz para reducir el gasto presupuestal de los gobiernos en materia de salud.
- Se calcula que cada año se podrían evitar 2.5 millones de defunciones si su consumo a nivel mundial se redujera al nivel recomendado.
Grave error
Al hablar del consumo excesivo, la gente de inmediato piensa en el salero, cuando una de las razones que no se tiene en cuenta es que el sodio ya viene incorporado en las comidas preparadas, la mayoría, más del 70%, proviene del consumo de alimentos envasados y preparados, y no de la sal de mesa que se le agrega a la comida.
Las personas consumen hasta el triple de sal de la cantidad recomendada por la OMS y esto puede generar diversos problemas de salud.
Beneficios
El sodio es un nutriente esencial que el cuerpo necesita en cantidades relativamente pequeñas para mantener los fluidos corporales en equilibrio y los músculos y nervios funcionando sin problemas.
El agregado de sal cumple varias funciones en los alimentos:
- Realzar el sabor.
- Ayudar en la conservación y seguridad de los alimentos.
- Mejorar la textura y la estabilidad de las comidas.
Tipos
Existen tres tipos de sal común, según su procedencia:
- Sal marina y la de manantial, que se obtienen por evaporación.
- Sal gema, que procede de la extracción minera de una roca mineral denominada halita.
- Sal vegetal, que se obtiene por concentración, al hervir una planta gramínea.