Agentes de Inteligencia de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) detuvieron a Kevin “N”, hijo de Felipe de Jesús Pérez “El Ojos”, exlíder del Cártel de Tláhuac.
La detención ocurrió en la calle Juan de Dios Peza, en la colonia Gutiérrez Nájera Fividesu de la alcaldía Tláhuac, donde los agentes seguían a Kevin Pérez. Tras salir de prisión, Kevin buscaba liderar el Cártel de Tláhuac, actualmente dominado por María de los Ángeles Ramírez, pareja de “El Ojos”.
Durante la operación, Pérez estaba acompañado de Julio César “N”. Los agentes les decomisaron 201 dosis de narcóticos (102 de marihuana y 99 de cocaína), un arma de fuego corta, un cargador con 14 cartuchos útiles, una subametralladora abastecida con 11 cartuchos, dos cangureras y dinero en efectivo, según informó la SSC.
Según el trabajo de investigación de gabinete y campo, la SSC reveló que Kevin “N”, posiblemente forma parte de un grupo delictivo dedicado a la extorsión, cobro de piso, tráfico de armas, homicidio y narcomenudeo, con presencia en la zona oriente de la Ciudad de México.
Ambos arrestados, de 36 y 22 años, fueron presentados ante el Ministerio Público, que determinará su situación legal e integrará la carpeta de investigación correspondiente para posteriormente determinar que sanción les será atribuida.
¿Quién era el Ojos?
Felipe de Jesús Pérez Luna, conocido como ‘El Ojos’, fue abatido en 2017 en un operativo en Tláhuac. El líder del Cártel de Tláhuac tenía 48 años y nunca fue encarcelado.
Desde 2012, el cártel de Pérez Luna controlaba el sur de Tláhuac, Milpa Alta y Xochimilco, y operaba también en Chalco, Estado de México, según informes de la Procuraduría capitalina. Inició su carrera delictiva como asaltante y posteriormente dirigió una flotilla de mototaxistas que distribuían drogas.
Reportes oficiales indican que ‘El Ojos’ era extremadamente violento y se le atribuyen decenas de asesinatos en varias zonas del Valle de México desde 2013. El cártel, bajo su liderazgo, se caracterizaba por su agresividad y métodos violentos.
Pérez Luna y siete de sus sicarios fueron abatidos durante un operativo conjunto de elementos de la Marina y la Policía Federal en la Colonia La Conchita Zapotitlán. El enfrentamiento puso fin a una escalada de crímenes en la región sur de la Ciudad de México.
La captura y posterior abatimiento de ‘El Ojos’ fue un punto crítico en la lucha contra los cárteles de droga en la capital, marcando un hito en la intervención de autoridades federales.