¿Qué pasó con el “perro gigante” del extinto México Mágico en Chapultepec?

México Mágico fue un parque de diversiones que por muchos años compitió en cantidad de visitantes con destinos como la Feria de Chapultepec y el Papalote Museo de Niño

Perro Gigante de México Mágico foto: Historias De La Ciudad de México/ Facebook

En un incendio registrado durante tareas de remodelación en el año 2010, una estructura didáctica conocida como “Perro Mágico” resultó dañada por las llamas en lo que anteriormente era el parque temático México Mágico, localizado en la segunda sección del Bosque de Chapultepec. Este suceso provocó la clausura temporal de la zona y la atracción, aunque, afortunadamente, no se reportaron personas lesionadas.

El Perro Mágico, una imponente figura de juego de aproximadamente 12 metros de altura por 10 de largo, capturaba la atención de visitantes por su gran tamaño. Los hechos se desencadenaron mientras trabajadores realizaban labores de renovación en el sitio, que ha permanecido cerrado al público durante más de 8 años. Elementos del cuerpo de bomberos y personal de servicios de emergencia acudieron prontamente al lugar para sofocar el fuego y asegurar la zona.

México Mágico foto: Tumblr

Aunque el parque México Mágico cerró sus puertas hace años, sigue siendo un referente cultural en la memoria de los habitantes locales.Hoy es recordado como el lugar que sirvió como centro de entretenimiento para las generaciones que crecieron en los años 90. Por lo que hoy miles de adultos capitalinos rememoran con nostalgia y cariño aquel lugar que llegó a competir en afluencia con Atlantis y la Feria de Chapultepec.

¿Qué era México Mágico?

Luego del incendio del perro en 2010, originado durante labores de remodelación, cerró las puertas de México Mágico, una popular atracción ubicada en la Segunda Sección de Chapultepec frente al Papalote Museo del Niño.

Este espacio único ofrecía a sus visitantes la oportunidad de explorar el interior de maquetas a gran escala, incluyendo un perro y un humano, proporcionando una experiencia educativa sobre la anatomía de estos seres vivos. Además, contaba con réplicas de pirámides que brindaban información valiosa sobre la era prehispánica.

México Mágico foto: Flickr

La singularidad de México Mágico residía en su propuesta interactiva y educativa, donde los asistentes podían aprender sobre biología y la historia prehispánica de una manera innovadora y entretenida. El daño más significativo fue al modelo de hule espuma en forma de perro, lo que marcó el fin de esta experiencia inmersiva. La pérdida de este espacio dejó una brecha en la oferta de entretenimiento educativo en la ciudad.

Sin embargo, para aquellos que aún anhelan la chance de adentrarse en estas únicas experiencias educativas, Minimundos emerge como una alternativa. Esta atracción ha logrado rescatar y reposicionar parte de las maquetas de México Mágico, permitiendo que nuevas generaciones descubran maravillas en miniatura y aprendan sobre diversos temas desde una perspectiva diferente. Minimundos se presenta como un tributo a la misión educativa que tenía México Mágico, adaptándose a los tiempos actuales y manteniendo viva la curiosidad por el aprendizaje en los más jóvenes.