¿Con la muerte de ‘Pancho Cayagua’, la Unión Tepito se extinguió? Esto sabemos

Francisco Javier Hernández Gómez era el contacto directo de la organización con el Barrio Bravo

Así fue la vida criminal de Pancho Cayagua ante de La Unión Tepito (Infobae)

El arresto de Francisco Javier Hernández Gómez, conocido como ‘Pancho Cayagua’ el 15 de agosto de 2016, marcó un punto de inflexión en la estructura de La Unión Tepito, un notorio cártel de la Ciudad de México.

El líder fue capturado mientras se dirigía a su residencia en Lindavista, al norte de la capital. Aunque su tiempo en prisión fue breve, su detención significó la disolución de La Unión Tepito, ya que él era el principal vínculo del cártel con el conocido Barrio Bravo.

Tras su caída, de forma metafórica, la organización adoptó un nuevo nombre, ‘La Unión de la B’, reflejando así el liderazgo de su nuevo cabecilla, con el respaldo de ‘Rachib’, hijo de Juan José Juárez Orozco, alias ‘El Abuelo’.

Las diferencias entre 'Pancho Cayagua' y 'El Betito' como líderes de La Unión Tepito (Infobae)

“Cuando Francisco Javier Hernández Gómez, ‘Pancho Cayagua’, fue aprehendido, el 15 de agosto de 2016, al dirigirse a su casa en Lindavista, al norte de la capital, y aunque no estuvo mucho en prisión, el nombre de La Unión Tepito se extinguió, él era el eslabón que unía al cártel, directamente con el Barrio Bravo, pues ahora su líder absoluto y la mayoría de sus capitanes, eran nacidos en la colonia Guerrero”, se lee.

El cambio de liderazgo propició una expansión significativa de la organización criminal, extendiendo sus operaciones más allá de la Ciudad de México hacia el Estado de México, Veracruz y Cancún. Este último destino, previamente visto como un refugio y punto estratégico para el tráfico de cocaína, se convirtió bajo el nuevo mando en un escenario para el ocio y enfrentamientos violentos con rivales como Los Zetas, donde la organización podía operar con impunidad.

Por este motivo a 'El Betito', no le gustaba que lo llamaran jefe (Infobae)

“Para los medios, ‘El Tepito’ seguía vendiendo, pero con la caída de ‘Pancho Cayagua’, el nombre del Cártel cambió a ‘La Unión de la B’, letra que no es más que el sello de su nuevo jefe, todo con la aprobación de ‘Rachib’, hijo de Juan José Juárez Orozco, ‘El Abuelo’, a partir de este momento, la organización criminal creció aún más a prácticamente toda la capital mexicana, Estado de México, Veracruz y Cancún, centro turístico y cultural, al que le cambiaron su estatus de refugio y zona para recibir cargamentos de cocaína, por otro más peligroso, uno por el cual les permitiría vacacionar y pelear contra Los Zetas, y armar tiroteos con toda impunidad, una segunda casa”, narró el autor del libro ‘Cártel Chilango’, del periodista Antonio Nieto.

Bajo este nuevo liderazgo y contexto, ‘La Unión’ no solo logró mantener su influencia en el tráfico de drogas y otras actividades ilícitas, sino que también marcó su territorio con actos de violencia y tiroteos, consolidando su presencia en importantes zonas turísticas y culturales del país.