La Fiscalía del Estado de Jalisco (FE) informó que está realizando una investigación detallada para esclarecer la muerte de cuatro individuos en el municipio de Encarnación de Díaz, los cuales tenían un narcomensaje firmado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Estas personas fueron halladas sin vida, envueltas en cobijas y cinta adhesiva cerca de un camino de terracería que dirige hacia un balneario próximo a la carretera Encarnación – San Juan.
El descubrimiento ocurrió alrededor de las 23:30 horas delmiércoles 25 de abril, cuando la policía municipal recibió un informe sobre los cuerpos, encontrados a 100 metros antes de llegar al mencionado balneario, en una zona conocida como Santa María Transportina. A su llegada, las autoridades confirmaron el hallazgo, aunque no pudieron determinar el género de las víctimas debido al estado en que se encontraban los cuerpos.
Inmediatamente, se implementaron los protocolos de investigación, con la presencia de policías de investigación y agentes del Ministerio Público, quienes comenzaron las indagatorias. Peritos en criminalística del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) se unieron a las labores, recabando indicios ya integrados en la carpeta de investigación.
Los cuerpos fueron trasladados al anfiteatro regional, donde se realizarán los dictámenes necesarios para establecer las causas de muerte y confirmar la identidad de las víctimas.
De acuerdo con información extraoficial, los cuerpos tenían un narcomensaje frimado por la organización de Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, mismo que decía: “Esto les va a pasar a todos los sicarios y colaboradores del Cartel de Sinaloa. Att. Operativa PRS CJNG”, detalla el mensaje.
El hallazgo de estos cuerpos se suma a los localizados el pasado 25 de marzo en el municipio de Encarnación de Díaz.
En febrero de este año, distintas pintas de la Operativa PRS del Cartel de Jalisco Nueva Generación aparecieron en bardas del municipio que también es conocido como La Chona, en donde se mencionaba que este brazo armado pertenece a Hugo Gonzalo Mendoza Gaytán, alias El Sapo o El 90, aunque este líder criminal también estaría involucrado en el Grupo Élite Delictivo de Reacción Inmediata (GEDDRI).
Además del narcotráfico, el GEDDRI también tiene incursiones bélicas que están enfocadas en impedir el avance del Cártel de Sinaloa en Los Altos de Jalisco.
Aseguran equipo de vigilancia del narco en Encarnación de Díaz
Elementos de seguridad en Encarnación de Díaz, Jalisco, desmantelaron un sistema de vigilancia que presuntamente era operado por organizaciones delictivas locales. La operación tuvo lugar el jueves 4 de abril, resultando en la confiscación de cámaras y otro equipo de monitoreo.
Este evento marca otro episodio en el que recursos tecnológicos asociados a grupos del crimen organizado son hallados en la región, un área de interés tanto para el Cártel de Sinaloa como para el CJNG.
La intervención estuvo liderada por la Secretaría de Seguridad del estado de Jalisco. Según se reporta, el material incautado incluía una red de cámaras de seguridad instalada con el fin de supervisar movimientos y actividades posiblemente ligadas a operaciones delictivas.
La localización específica del decomiso fue una propiedad situada en el kilómetro 1 de Encarnación de Díaz hacia San Sebastián del Álamo, en la colonia Arroyo de los Frascos. Un habitante del inmueble reveló a las autoridades que individuos armados le habían forzado, así como a otros residentes, a permitir la colocación del equipo hace aproximadamente cuatro meses, pero no se denunció en su momento por temor a represalias.
En el operativo se aseguraron cámaras de vigilancia y un repetidor de señal ubicado en el techo de la finca. La acción policial fue documentada y compartida por medios locales, donde se destacaron los esfuerzos de las fuerzas de seguridad por neutralizar herramientas utilizadas potencialmente para actividades de vigilancia criminal.
Esta información contribuye al registro de acciones emprendidas por las autoridades para combatir la presencia y operaciones de grupos criminales en Jalisco, una región cada vez más afectada por la disputa territorial entre el CJNG y el Cártel de Sinaloa.