El 18 de enero de 1997, Lucero y Mijares protagonizaron uno de los eventos más emblemáticos en la historia del entretenimiento mexicano: su boda. Es por eso que aquí te decimos cómo luce la emblemática escuela en CDMX en donde celebraron el enlace nupcial.
La pareja, que había iniciado su noviazgo dos años antes, durante la grabación de la telenovela Lazos de Amor, se convirtió en una de las favoritas del público mexicano.
Se dice que Mijares conquistó el corazón de Lucero con gestos románticos, como enviarle enormes ramos de flores mientras ella estaba ocupada en el set de grabación.
¿Dónde y cómo fue la boda de Lucero y Mijares?
El enlace se llevó a cabo en el Colegio de las Vizcaínas de la Ciudad de México, un lugar mágico que sirvió de escenario para una ceremonia que contó con la asistencia de más de 700 invitados.
La boda fue un evento mediático, transmitido en vivo por Televisa y conducido por la legendaria actriz Silvia Pinal. Lucero deslumbró a todos con un vestido de ensueño diseñado por Claudio Sala.
La transmisión causó polémica, pues surgieron rumores de que el matrimonio había sido arreglado y que tenían un contrato con Televisa, algo que Lucero desmintió en una entrevista años después.
Durante su matrimonio, Lucero y Mijares tuvieron dos hijos, José Manuel y Lucerito. A pesar de haber sido considerada una de las parejas más emblemáticas del espectáculo en México, en 2011 anunciaron su separación, pero hasta la fecha son dos grandes amigos.
Así luce actualmente el Colegio de las Vizcaínas de la Ciudad de México
De acuerdo con el sitio oficial del lugar, el Colegio de San Ignacio de Loyola Vizcaínas I.A.P, fue fundado en 1732 por la Cofradía de Nuestra Señora de Aránzazu y, aunque su propósito original fue brindar refugio y protección a mujeres novohispanas necesitadas, especialmente a niñas, doncellas y damas viudas, también se ha ido transformando a lo largo de los años.
El diseño arquitectónico inicial estuvo a cargo de Pedro Bueno Basori, un miembro de la cofradía, pero debido a su fallecimiento antes de comenzar la construcción, la obra fue completada por el maestro en arquitectura Miguel José de Rivera. Además, es considerado un monumento histórico por parte del INAH.
Debido a que el sitio es considerado un monumento histórico por parte del INAH, actualmente su fachada original se conserva. Aunque funge como una escuela regularmente, también es alquilado para todo tipo de eventos, como es el caso de graduaciones o bodas.