Vecinos de BJ cierran Insurgentes y Xola ante crisis de agua contaminada; Sacmex ofrece mesa de diálogo por la tarde

Vecinos de la alcaldía Benito Juárez (BJ) cerraron la avenida de los Insurgentes y Xola, pues exigen que las autoridades les brinden agua limpia, ya que, desde hace tres semanas, han denunciado que el agua está contaminada con lo que parece aceite o gasolina.

Sobre el tema, en entrevista con medios de comunicación, Pedro Castillo, director de atención de usuarios de Sacmex, le ofreció a los vecinos una mesa de diálogo a las 18:00 horas. Ante dicha propuesta, los vecinos han declarado que aceptan la mesa de diálogo, sin embargo, no liberarán la vialidad hasta que les den una solución.

Vecinos de la Benito Juárez han declarado que las autoridades no han tomado en cuenta la afectación económica hacia ellos, pues cada uno debe comprar garrafones de agua para bañarse, algo que les ha costado mucho.

Señalaron que las autoridades les ofrecen un garrafón por persona en el parque de San Lorenzo a los afectados. Además, declararon, les están ofreciendo lavar las cisternas y tinacos “que ellos contaminaron”, así como llenar las cisternas y tinacos con agua de pipa, aunque acusan, esos son paliativos, no soluciones.

El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, ha confirmado la presencia de agua contaminada en la alcaldía Benito Juárez ante denuncias de vecinos que reportaron olores y sustancias similares a ‘gasolina’ en el suministro de agua potable. El problema parece concentrarse en una zona específica del poniente de la demarcación, donde análisis han identificado contaminantes asociados con aceites y lubricantes, incluyendo gasolina, en el agua.

Inicialmente, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México había negado la presencia de hidrocarburos, solventes y compuestos orgánicos volátiles basándose en pruebas preliminares. No obstante, tras continuas quejas de los residentes, se realizó una investigación más detallada.

Durante una conferencia el 8 de abril de 2024, Batres detalló que los análisis sugerían que la contaminación podría provenir de aceites y lubricantes. Además, se empleó un explosímetro para evaluar el agua, determinando que no existe riesgo de explosividad.

Actualmente, las autoridades están llevando a cabo una investigación exhaustiva para identificar la fuente específica de la contaminación. Esto incluye análisis y rastreos en posibles lugares de interés tales como gasolineras, obras de construcción y establecimientos cercanos a la zona afectada.

Batres también aseguró que se han descartado como fuentes del problema al Sistema Cutzamala o al Tanque de Santa Lucía, así como pozos ubicados en la zona de Benito Juárez. Este enfoque detallado subraya el compromiso de las autoridades para localizar la fuente exacta de la contaminación y abordar el incidente de manera efectiva.