México vivió un evento astronómico que pasará a la historia, en distintos puntos de la República Mexicana el 8 de abril de 2024 miles de personas pudieron disfrutar de un eclipse solar total.
El fenómeno de gran expectación donde la Luna se interpuso entre la Tierra y el Sol, ocultando completamente al astro durante unos minutos. Este eclipse fue visible, en su fase de totalidad, en varias regiones del país, que abarcaron desde Baja California, pasando por varios estados del norte y centro, incluyendo Coahuila, Durango, Zacatecas, Nuevo León, San Luis Potosí, hasta llegar a estados del sur como Oaxaca y Chiapas.
Fue un espectáculo natural impresionante, desafortunadamente volverá a ocurrir algo similar hasta el 30 de marzo del año 2052, es decir, en 28 años.
Para observar el eclipse solar total se tomaron en cuenta las precauciones necesarias para proteger la vista, utilizando lentes especiales, filtros o métodos de proyección indirecta, ya que mirar directamente al Sol, incluso durante un eclipse, puede causar daño permanente a los ojos.
No obstante, por medio de redes sociales y en las zonas de observación, miles de usuarios reportaron algunos efectos que tuvo el fenómeno astronómico, el que llamó bastante la atención fue el descenso de temperatura durante el punto máximo de los astros.
De acuerdo con la NASA, cuando este fenómeno alcanza su ápice, se registra una caída en la temperatura de entre 2 y 6 grados. Esta baja térmica es consecuencia directa de la obstrucción de luz solar por parte de la Luna, fenómeno que incide directamente en el ambiente terrestre.
Cabe recordar que durante un eclipse solar total, la Luna toma su posición exactamente entre la Tierra y el Sol, bloqueando la luz solar y proyectando una sombra sobre ciertas áreas de la Tierra. Al disminuir la radiación solar directa, la energía absorbida por la superficie también se reduce, lo que lleva a una disminución temporal de la temperatura en las regiones experimentando la totalidad del eclipse.
Este enfriamiento puede ser perceptible, y las temperaturas pueden descender varios grados en el área bajo la sombra total de la Luna. La magnitud del descenso de temperatura varía según la ubicación geográfica, las condiciones climáticas locales e incluso la estación del año en que ocurre el eclipse.