A 30 años del primer debate presidencial en México: así fue el diálogo de Zedillo, Fernández de Cevallos y Cárdenas

El próximo domingo 7 de abril, México tendrá el primer debate presidencial en el marco del proceso electoral 2023-2024

El primer debate presidencial fue en 1994 (Cuartoscuro)

El próximo domingo 7 de abril se realizará el primer debate presidencial entre Claudia Sheinbaum Pardo, Xóchitl Gálvez Ruiz y Jorge Álvarez Máynez; sin embargo, aunque se ha vuelto un ejercicio cotidiano en cada proceso electoral tanto a nivel local como federal, la realidad es que este año cumple 30 años de que se celebró el primero en México.

El año de 1994 fue uno de los años más polémicos de la historia moderna del país, puesto que se vivieron revueltas sociales, el magnicidio de un candidato presidencial, una fuerte crisis económica y muchos otros aspectos que dieron pie a que años después se presentara una apertura democrática que no se veía en el país debido al dominio del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Previo al debate

A finales de 1993, se conoció que los candidatos a la presidencia serían Luis Donaldo Colosio Murrieta —PRI—, Diego Fernández de Cevallos —Partido Acción Nacional (PAN)— y Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano —Partido de la Revolución Democrática (PRD)—.

Debido a esto, el priista mostró interés en que se llevara a cabo el primer debate en el país, por lo que en primera instancia invitó a Cárdenas, quien rápidamente aceptó. Posteriormente fueron invitados el representante panista y Cecilia Soto; sin embargo, el evento nunca se realizó debido a que se atrasó por el levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), así como el asesinato de Colosio.

Tras la pérdida del candidato, el entonces partido oficialista designó a Ernesto Zedillo Ponce de León como el candidato, anteriormente fungía como el coordinador de la campaña del oriundo de Magdalena de Kino, Sonora.

En 1994 se celebró el primer encuentro entre Ernesto Zedillo, Diego Fernández de Cevallos y Cuauhtémoc Cárdenas (Crédito: YouTube/UNAM Global)

El 12 de mayo fue la fecha elegida para inaugurar una tradición que sigue vigente en el país. Los tres candidatos acudieron al Museo Tecnológico de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en la Ciudad de México. La moderación corrió a cargo de la conductora y periodista Mayté Noriega.

La ausencia notable fue la de Jorge González Torres, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), quien no fue incluido en el debate.

El debate se centró en temas fundamentales como la economía, la seguridad, la gobernabilidad y la política social, aunque es importante decir que la definición de las temáticas no fue tan clara como sucede actualmennte. Fue la oportunidad idónea para que los candidatos expusieran sus propuestas a la nación y debatieran sus diferencias, algo que no había pasado en la historia del país.

Este evento permitió por primera vez a los votantes escuchar y comparar directamente las visiones de los aspirantes a dirigir el país, en un momento en que México enfrentaba desafíos significativos tanto a nivel nacional como internacional.

Tas el asesinato de Colosio, su coordinador de campaña, Ernesto Zedillo fue el candidato del PRI y sucesor de Carlos Salinas de Gortari (X/@ElTuerkaas)

Actualmente, la organización del evento corre a cargo del Instituto Nacional Electoral (INE); no obstante, 30 años antes fue materializado por los equipos de campaña, debido a que no era un ejercicio previsto en la ley, ya que actualmente es una obligación para los candidatos porque forma parte de información necesaria para el electorado.

A partir de entonces, los debates contribuyeron a modificar la forma en que los candidatos y los partidos políticos comunicaban sus mensajes a los electores, además de cómo los ciudadanos percibían y evaluaban a quienes aspiraban a representarlos.

¿Quién ganó el debate?

De acuerdo a datos de la época, más de 34 millones de personas vieron el primer intercambio de ideas, por lo que casas encuestadoras levantaron estudios para conocer cuál fue la percepción, misma que sorprendió y sentó un precedente de lo que pasaría seis años después con la apertura democrática.

Fue el Acervo de Opinión Pública de la Oficina de la Presidencia de la República Mexicana del CIDE, el ganador fue Fernández de Cevallos con el 54.6% de las valoraciones, seguido de Zedillo Ponce de León con el 16.9% y en tercer lugar quedó Cárdenas con el 1.9 por ciento.

Pese a esto, las encuestas no cambiaron y el priista se mantuvo en primer lugar, lo que a la postre significó su triunfo en las elecciones de aquel año.