Así fue la falsa captura de “El Betito”: el líder de la Unión Tepito que se burló del Gobierno de la CDMX

Actualmente “El Betito”, se encuentra cumpliendo una condena de 43 años de prisión por los delitos de homicidio calificado y homicidio en grado de tentativa, hechos que ocurrieron en marzo de 2015; sin embargo, antes de que el otrora líder de la Unión Tepito pisara la cárcel, se atrevió a burlarse del Gobierno de la CDMX.

Desde su nombre real, “El Betito” ya daba muestras de lo escurridizo que se convertiría para las autoridades; mientras muchos lo identificaban como Roberto Mollado (Moyado) Esparza, pocos sabían que fue registrado como José Alberto Maldonado López.

Pero de poco sirvió a las autoridades conocer si nombre verdadero, pues “El Betito” usaba identificaciones con nombres falsos, además pocos eran los integrantes de la Unión Tepito que lo llamaban por su nombre, muchos preferían decirle El Flamitas”, “El Chaparrito” o “El Mini Alex Syntek”.

Entre 2015 y 2018 la Unión Tepito estuvo bajo el mando de Maldonado López, los primeros años como producto de una reorganización del cártel que buscaba nuevo líder: él y Pancho Cayagua, a quien asesinaron en 2017, eran los principales aspirantes.

El 8 de agosto de 2018 la Secretaría de Gobierno de la CDMX anunció con bombo y platillo la captura de uno de los principales generadores de violencia y tráfico de drogas en la capital del país; por fin detenían a “El Betito”, aunque no era la primera vez que se presumía su aprehensión.

En su libro “El Cártel Chilango”, el periodista Antonio Nieto relata como en noviembre de 2015 el subprocurador Óscar Montes de Oca Rosales lo citó para que informara sobre la detención de “El Betito”; en ese entonces se dijo que el criminal había sido capturado en calles del centro de la capital y que dos comerciantes lo identificaron como extorsionador.

Los medios locales y nacionales replicaron la noticia, el entonces Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera y su círculo cercano presumieron la captura, incluso líderes de comerciantes se pronunciaron a favor del trabajo de las autoridades... pero pronto supieron que el detenido era alguien que se parecía a “El Betito”.

El nombre del detenido -según los registros de las averiguaciones- era Juan Antonio Ruiz Maciel: tenía 34 años, era calvo y un poco pasado de peso, pero no era líder de la Unión Tepito, sino un simple cobrador, eso sí, de extorsiones.

El Gobierno de Mancera -que siempre sostuvo que no había cárteles en la CDMX- prefirió que la noticia se apagara sola, que la falsa captura de “El Betito” quedara en las páginas de los medios como un error “simple” que pronto se olvidaría; empero, ante la continuidad de las extorsiones, secuestros y cobro de piso en el capital, la sociedad volvió a hacer presión y la figura de la Unión Tepito cobró más peso.

Previo a su falsa captura “El Betito” se enfrascó en una balacera con un viejo aliado, Fabián Miranda, quien estaba cobrando las extorsiones a nombre de la Unión Tepito. Para aclarar las cosas ambos se citaron en un estacionamiento cerca de la Plaza Santo Domingo, célebre por sus escritores de cartas románticas en la primera mitad del siglo XX y por sus falsificaciones de documentos en la actualidad.

Antes de que se desatara la balacera, “El Betito” y “El Fabián” intercambiaron unas palabras; el primero acusó y el segundo lo negó; segundos después las ráfagas de balas hicieron correr a turistas, caminantes, comerciantes y policías.

Ambos salieron ilesos de la balacera pero, cual millennials, continuaron con su guerra en las redes sociales: en canales de YouTube “El Fabián” lanzó acusaciones contra “El Betito” y pidió a las autoridades que lo detuvieran por el bien de los comerciantes capitalinos; el escurridizo y ágil líder de la Unión Tepito hizo lo propio pero difundió una imagen de su rival afirmando que era “El Betito”, el “verdadero extorsionador”, lo que despistó a policías, medios e investigadores. Todos cayeron en la trampa.