¿La conoces? Ésta es la ‘maldición’ de Eduardo Palomo, uno de los mitos más sonados de la televisión mexicana

Las coincidencias en los decesos de las actrices que trabajaron con el actor alimentan rumores sobre una maldición

Especulaciones surgen sobre una maldición vinculada a Eduardo Palomo

La repentina muerte del reconocido actor Eduardo Palomo a los 41 años, a causa de un fulminante ataque al corazón mientras cenaba en un restaurante en Los Ángeles, California, dejó consternado al público mexicano y a la industria del entretenimiento.

A pesar de ser consciente de su cardiopatía, se le consideraba saludable, lo que añadió un halo de misterio a su fallecimiento, incluso propiciando la propagación de rumores sobre una supuesta maldición vinculada a su muerte.

Según estas especulaciones, la llamada “maldición de Eduardo Palomo” parecía perseguir a las actrices que compartieron pantalla con él en diversas producciones. Tres nombres se alzaron entre aquellos que habrían sido tocados por un destino trágico tras trabajar junto al actor: Mariana Levy, Lorena Rojas y Edith González.

Mariana Levy, Lorena Rojas y Edith González, coestrellas de Palomo, comparten destinos trágicos (Foto: Especial)

La “maldición” de Eduardo Palomo

A lo largo de su carrera, compartió escenas con actrices de renombre como Edith González, Lorena Rojas y Mariana Levy. Trágicamente, estas actrices, al igual que el actor, fallecieron en circunstancias lamentables, lo que generó un mito sobre una supuesta maldición que rodeaba al actor y a quienes compartieron roles protagónicos con él en las telenovelas.

Mariana Levy, quien compartió escenario con Palomo, falleció a los 36 años víctima de un paro cardiaco en 2005. Edith González, con quien protagonizó la telenovela “Corazón Salvaje” en 1993, falleció el 13 de junio de 2019 tras una batalla contra el cáncer de ovario. Lorena Rojas, otra destacada actriz que trabajó junto a Palomo en “Alcanzar una estrella II” en 1991, murió en febrero de 2015 en Miami, Florida, después de luchar contra el cáncer de mama diagnosticado en 2008.

A pesar de estas trágicas pérdidas y las especulaciones en torno a una posible maldición, la trayectoria de Eduardo Palomo queda marcada por su prolífica carrera en el mundo del entretenimiento. Desde su debut a los 12 años, participó en un total de 15 producciones teatrales, 20 películas, 19 telenovelas y 8 programas de televisión, dejando un legado que va más allá de los rumores y las especulaciones sobre su inesperada partida.

La vida y legado de Eduardo Palomo más allá de los rumores

¿Qué fue lo que le pasó a Eduardo Palomo?

Recordado por ser uno de los protagonistas más destacados en las telenovelas de la década de los noventa, dejó una huella imborrable en el mundo de la actuación tras su formación en el Instituto Andrés Soler.

Allí, no sólo pulió sus habilidades actorales, sino que también desarrolló talentos en el canto y la danza. Su carrera tomó impulso con su debut teatral en “Los 10 mandamientos”, momento que captó la atención de productores televisivos y lo catapultó a roles protagónicos en producciones como “La picara soñadora”, “Triángulo”, “Corazón salvaje”, “Morir dos veces” y “Huracán”, entre otras.

Palomo, quien falleció a los 41 años en 2003, experimentó su deceso de manera súbita en un restaurante de Los Ángeles. En ese entonces, el actor se encontraba en una etapa prominente de su carrera, rodeado del cariño y respeto tanto del público como de sus colegas. A lo largo de su trayectoria, compartió escena con actrices de renombre como Edith González, Lorena Rojas y Mariana Levy, todas ellas también fallecidas posteriormente, lo que llevó a los seguidores de las telenovelas a trazar un trágico vínculo entre sus muertes.

La coincidencia de los decesos, algunos a causa de enfermedades como el cáncer y otros por infarto, similar al final de Palomo y Levy, ha alimentado especulaciones sobre una supuesta maldición en redes sociales. Sin embargo, no existe una conexión directa entre estas lamentables pérdidas más allá del terreno de las conjeturas.

Las coincidencias en los decesos de las actrices que trabajaron con Palomo alimentan rumores sobre una maldición que resuena entre sus seguidores y más allá

La “maldición” de Corazón Salvaje

La emblemática telenovela “Corazón Salvaje”, protagonizada en 1993 por Eduardo Palomo y Edith González, se convirtió en un ícono de la televisión mexicana. Este clásico, adaptado por María Zarattini a partir de la obra original de Caridad Bravo Adams, es recordado como una de las producciones más queridas por el público, marcando la tercera vez que la historia fue llevada a la pantalla chica.

La pareja formada por González y Palomo fue especialmente celebrada por su química en pantalla, dejando una huella imborrable en los corazones de los espectadores. Sin embargo, este proyecto también quedó marcado por la tragedia, ya que ambos protagonistas fallecieron antes de que la telenovela alcanzara los 30 años de su estreno.

Ambientada en el pintoresco Puerto Vallarta de inicios del siglo XX, contó la historia de un tormentoso triángulo amoroso, capturando la atención del público durante sus 160 episodios. El relato giró en torno a Mónica (interpretada por Edith González), Aimée (Ana Colchero) y Juan del Diablo (Eduardo Palomo), el hijo ilegítimo de un acaudalado terrateniente. Ariel López Padilla completó el elenco principal en el papel de Carlos Andrés, hermano de Juan del Diablo.

La telenovela Corazón Salvaje marcada por la tragedia de sus protagonistas

La producida por José Rendón para Televisa se distinguió no solo por su éxito entre los espectadores, sino también por las trágicas muertes que impactaron a varios miembros del elenco, lo que alimentó especulaciones sobre una supuesta maldición relacionada con esta adaptación.

Eduardo Palomo falleció de manera repentina el 6 de noviembre de 2003 en Los Ángeles, California. A la edad de 41 años, el actor se encontraba cenando con su esposa y amigos cuando, tras reírse de un chiste, perdió la conciencia y no volvió a despertar. Según relató posteriormente su viuda, Carina Ricco, en un principio pareció que el actor simplemente se había quedado dormido; sin embargo, la situación era mucho más grave. Los equipos de emergencia confirmaron su fallecimiento debido a un infarto fulminante.