Elena Larrea, reconocida activista mexicana y fundadora de Cuacolandia, un refugio para animales situado en el estado de Puebla, fue homenajeada recientemente en una ceremonia, realizada en la explanada de la entidad antes mencionada, que buscaba resaltar, agradecer y recordar su incansable labor y compromiso con la causa animal.
Larrea, quien dedicó gran parte de su vida al rescate y cuidado de animales en situación de riesgo, dejó un legado imborrable que seguramente continuará inspirando a numerosas personas dentro y fuera de México.
La ceremonia del primer homenaje a Elena Larrea se llevó a cabo en Puebla, principal ciudad que fue testigo de su arduo trabajo y dedicación. Familiares, amigos, seguidores de su trabajo y voluntarios de Cuacolandia para recordar, celebrar la vida y obra de Larrea. Durante el evento, se mostraron letreros con emotivas palabras llenas de cariño, además de agradecimiento por darle vida a “quienes no tienen voz”, es decir a los animales a los que tanto amó.
Además de resaltar su labor en el refugio, el homenaje también sirvió para reconocer su activismo en la lucha por los derechos de los animales. Larrea fue una voz importante en la promoción de leyes y políticas que buscan el bienestar y la protección de los seres no humanos. Participó activamente en campañas de concientización y educación sobre la importancia del respeto hacia todas las formas de vida.
Como claro ejemplo tenemos el impulso que dio a las reformas, que ya se publicaron el Diario Oficial de Puebla, a la Ley del Bienestar Animal para considerar la zoofilia como un delito que recibe una pena por hasta 4 años de prisión, lo que permitió la vinculación a proceso del primer hombre que agrede sexualmente a una yegua, proceso jurídico que nunca antes había ocurrido en México.
La ceremonia de homenaje a Elena Larrea en Puebla buscó dejar un mensaje claro: la lucha por la justicia y el respeto hacia los animales es un camino que requiere de la colaboración y empatía de todos.
La memoria de Larrea y su incansable esfuerzo continúan vivos, motivando a nuevas generaciones a tomar acción y contribuir a la construcción de un mundo más justo para todos los seres vivos. Su legado perdura como una fuente de inspiración y un recordatorio de que el amor, la dedicación y la lucha pueden marcar la diferencia en la vida de muchos.
Cuacolandia envía comunicado para aclarar situación del santuario
Cuacolandia, el refugio fundado por Larrea, se ha convertido en un símbolo de esperanza y recuperación para cientos de animales, especialmente para aquellos abandonados o maltratados. Este santuario ofrece no solo albergue, sino también atención veterinaria y amor, elementos cruciales para la rehabilitación y bienestar de sus residentes. Bajo la dirección de Larrea, Cuacolandia logró salvar a incontables vidas de los equinos.
Como consecuencia, desde el momento en que se supo de la muerte de la activista y animalista, se comenzó a especular qué ocurriría con el santuario de caballos, yeguas y ponis, por lo tanto, las redes sociales oficiales de Cuacolandia especificaron lo que sucederá a continuación.
De acuerdo con el comunicado se informó que las donaciones en especie y en efectivo serán únicamente en el recinto, hasta nuevo aviso, pues buscan evitar a toda costa que personas se aprovechen de esto para recibir ingresos económicos. En caso de las transferencias pidieron detenerlas un tiempo hasta que den a conocer las nuevas cuentas oficiales.
Asimismo, con el propósito de continuar con el trabajo que Larrea inició, el equipo de Cuacolandia ha reafirmado su compromiso de seguir adelante con la misión del refugio.