Sano y salvo. Así fue localizado durante la madrugada de este miércoles el periodista Jaime Barrera Rodríguez, quien fue visto por última ve la tarde del pasado 11 de marzo en Zapopan, Jalisco. En sus primeras declaraciones, el comunicador reveló que sus captores no pidieron dinero a cambio de su liberación; en su lugar, dejaron una advertencia: tiene que dejar de cubrir ciertos temas. Al respecto, surge la pregunta: ¿qué grupo criminal puede estar detrás de estos hechos?
De acuerdo con la cronología de los hechos y los reportes policiales públicos, el reconocido comunicador jalisciense acudió a su programa radiofónico en las instalaciones de Megaradio, ubicadas en la colonia Jardín de San Ignacio y, alrededor de las 14:00 horas del lunes, salió del edificio para retirarse en su vehículo.
Fue entonces cuando, según reveló el titular de la Fiscalía del Estado (FE) de Jalisco, fue interceptado por un grupo de tres o cuatro hombres, uno de los cuales contaba con un arma larga.
El relato del colaborador de Televisa Guadalajara, El Informador y Canal 44 indica que fue obligado a subir a otro vehículo con los ojos vendados y las manos atadas. Acto seguido, comenzó a ser cuestionado sobre por qué escribía lo que escribe y para quién trabaja.
“Yo lo que les decía yo no escribo por parte de nadie ni por consigna de nadie, yo escribo lo que creo que es periodístico (...). Yo creo que era un poco de intimidación”, compartió en una breve entrevista con Azucena Uresti para Grupo Fórmula.
En otros encuentros con medios de comunicación, indicó que, poco después de 24 horas recluido en una bodega, sus captores lo trasladaron al municipio de Magdalena, Jalisco, donde lo liberaron con una advertencia.
“Si no cumplía cosas o no le ‘bajaba’, ya sabían dónde vivo, quiénes son mis hijos, por dónde me muevo”.
Al respecto, destaca que estos hechos se registraron a casi un mes de que el comunicador publicara la columna ‘EU lo persigue, en Autlán lo consienten’; un texto en el que directamente habla sobre Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘El Mencho’, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El CJNG, principal sospechoso
Según datos de las autoridades federales actualizados hasta finales de 2022, la organización criminal que tiene mayor presencia en Jalisco es el cártel de las cuatro letras, pues sus actividades ilícitas han sido rastreadas en toda la entidad.
Entre los 125 municipios en los que el CJNG opera se encuentra Zapopan, municipio en el que el periodista Barrera Rodríguez fue privado de su libertad. Pero no son los únicos.
Diversas investigaciones indican que en la ciudad también existe presencia de Los Cuinis, brazo financiero del CJNG encabezado por la familia González Valencia, y el Cártel Nueva Plaza, grupo criminal que nació como una escisión de la misma organización, pero que actualmente es su rival.
Pese a ello, múltiples medios de comunicación ya señalan como responsables directamente al CJNG, pues es al que se le ha atribuido la mayor cantidad de crímenes de los tres grupos, además de que Zapopan es una de las ciudades en donde han creado una red empresarial para el blanqueo de sus ganancias ilícitas.
Asimismo, tal y como refiere el periodista Héctor de Mauleón en su más reciente columna, Jaime Barrera Rodríguez recientemente había escrito sobre el líder de esta organización criminal.
“Escribió entonces las líneas que, según fuentes del estado vinculadas a la investigación, pudieron provocar que fuera privado de la libertad al salir de su programa radiofónico (sic)”, señaló.
Hasta el momento, las autoridades no han detenido a ninguno de los responsables o referido qué grupo criminal podría estar detrás de la retención ilegal del comunicador.