Este es el sencillo hábito diario que refuerza tu autoestima e incrementa tu felicidad, según la ciencia

Un estudio encontró que aquellos que practican este habito cada día presentan menores niveles de cortisol que quienes no lo hacen de forma habitual

Este sencillo hábito toma apenas unos minutos al día (Imagen Ilustrativa Infobae)

Sin duda la felicidad es un estado que todos buscamos alcanzar aunque muchas veces es algo que parece más lejano de lo que creemos. Y es que solemos buscar este estado de bienestar en cosas materiales, experiencias o en lograr grandes objetivos; sin embargo, lograrla está quizá en detalles más sencillos y pequeños.

Esto coincide con lo dicho por diversos expertos en psicología, quienes señalan que a veces los actos más pequeños pero consistentes son aquellos que nos generaran una mayor sensación de felicidad, más estable y más largo plazo.

Y entre estas acciones sencillas pero poderosas, que ayudan a liberar a las llamadas hormonas de la felicidad, entre las que se encuentran la dopamina, la oxitocina y la serotonina, se encuentran algunas destacadas como cantar, bailar, realizar ejercicio.

Sin embargo, existe otra que también es fácil de llevar a cabo de manera diaria, que toma muy poco de nuestro tiempo, y que diversos estudios han demostrado su enorme impacto en nuestra salud tanto física como mental, en nuestra autoestima y en nuestro sensación de felicidad general, nos referimos a los abrazos.

Se encuentra científicamente demostrado que los abrazos activan la liberación de las hormonas de la felicidad (Imagen ilustrativa Infobae)

Y es que este hábito simple pero poderoso no solo ayuda a reducir el estrés sino se ha encontrado que ayuda a reducir los estados de ansiedad, a regular el ritmo cardiaco y brinda la sensación de que somos amados y valorados.

Abrazar estimula el contacto físico esencial para fomentar el vínculo emocional y eleva los niveles de las hormonas asociadas a la felicidad, lo que a su vez puede disminuir la producción de cortisol, contribuyendo así a la reducción del estrés cotidiano.

Este beneficio se relaciona con la oxitocina, conocida como la “hormona del amor”, que fortalece las conexiones emocionales. Sin embargo, la oxitocina no es la única hormona involucrada; las endorfinas, que mejoran el ánimo y poseen efectos analgésicos, y la serotonina, que incrementa la sensación de bienestar y refuerza la resiliencia frente al estrés diario, también juegan un papel importante.

Los abrazos en los menores ayudan a fortalecer su autoestima y les brinda segura (Imagen ilustrativa Infobae)

Además de adoptar la práctica de abrazar con frecuentemente a las personas importantes en tu vida es una manera poderosa de expresar amor, cariño o soporte a alguien sin necesidad de palabras, y ambos participantes disfrutan de sus beneficios.

Un estudio realizado por la Universidad de California ha mostrado que aquellos que reciben una mayor cantidad de abrazos durante el día presentan una menor respuesta al cortisol por las mañanas, indicando que las personas que inician su día con abrazos tienden a tener niveles más bajos de cortisol.

Por otro lado, una investigación de la Universidad Carnegie Mellon en Pittsburgh reveló que recibir un abrazo después de una disputa personal ayuda a disminuir los sentimientos adversos y la sensación de alejamiento con la otra persona, contribuyendo así a la reparación del vínculo afectivo. También se encontró que los abrazos mejoran el ánimo y reducen la ansiedad. Por tanto, si buscas incrementar tu felicidad, considera aumentar el número de abrazos que das diariamente.

La importante práctica de autoabrazarnos

Sin embargo, cabe mencionar que la ciencia ha encontrado que para obtener estos beneficios no es estrictamente necesario que dichos abrazos provengan de otras personas sino que, los abrazos a uno mismo pueden tener iguales resultados.

Abrasarse a uno mismo supone los mismo efectos positivos y es una práctica que todos deberíamos realizar, según especialistas (Pexels)

Lo anterior se debe a que abrazarse a uno mismo ayuda a fortalecer los lazos de amor y la relación de aprecio que tenemos con nosotros. De acuerdo con los especialistas, muchas veces solemos tener actos de amor hacia los demás pero no hacia nosotros y abrazarnos puede ser una manera de enviarnos la señal de que nos apreciamos y valoramos tanto como lo hacemos con los demás.

Por otro lado, autoabrazarse manda una señal al cerebro de que no necesitamos el amor y reconocimiento de los otros para sentirnos igualmente amados o valorados, pues nosotros mismos nos damos ese cariño y respeto.

Si bien somo seres sociales que necesitan de los demás, es importante aprender a darnos el mismo cariño y las mismas muestra de amor y comprensión que damos a los demás así como aprender a que nosotros podemos brindarnos ese apoyo, respaldo y cariño cuando sentimos que otros no nos lo dan.

En este sentido, se incita a las personas practicar diariamente no solo los abrazos a los otros sino también los abrazos a nosotros mismos, acompañados de palabras de amor, acto que puede ayudar a incrementar nuestra autoestima en gran medida.