Cómo controlar los antojos dulces, según la ciencia

Existen varios factores que pueden incrementar el deseo de comer cosas ricas en azúcar

Los alimentos ricos en azúcar pueden generar problemas de salud (Imagen Ilustrativa Infobae)

Los antojos dulces es algo que para muchas personas es una tentación difícil de resistir, debido a que siempre en el día existe ese pequeño momento en que necesitamos comer ese alimento rico en azúcar y calorías para sentirnos mejor.

Sin embargo, aunque sea un placer momentáneo, lo cierto es que este mal hábito, a largo plazo, puede causarnos varios problemas de salud tales como sobrepeso, caries, falta de energía e incluso enfermedades como al diabetes.

Es por ello que especialistas en nutrición de la Universidad de Bond han brindado estrategias que para quienes suelen tener problemas para evitar comer cosas dulces entre comidas.

En especial, la nutricionista Hayley O´Neill mencionó cuatro herramientas fundamentales que pueden ayudar para consumir menos azúcar.

1-Aumentar tu consumo de proteína y fibra

Una alimentación que incluya abundantes proteínas y fibra es clave para sentirse satisfecho y evitar las ganas de comer entre horas.

La fibra soluble, al combinarse con el agua en el estómago, crea un gel que ralentiza la absorción de azúcar en la sangre. Esta acción contribuye a estabilizar los niveles de glucosa en sangre, previniendo así los aumentos y descensos bruscos que pueden provocar deseos de comer.

Consumir alimentos ricos en fibra como la avena ayudará a tener sensación de saciedad durante más tiempo (Imagen Ilustrativa Infobae)

2-Controla tus niveles de estrés

El estrés es una respuesta instintiva del organismo ante circunstancias retadoras o peligrosas. No obstante, si se extiende en el tiempo, puede repercutir de manera importante en el bienestar psicológico y en los patrones de consumo de alimentos.

En este sentido, un estado constante de estrés puede llevarnos a tener mayor deseo de consumir cosas dulces. Practicar meditación o actividades relajantes nos podrían ayudar a combatir nuestro deseo de comer cosas ricas en azúcar.

El estrés incremente nuestro deseo de comer cosas dulces (Imagen ilustrativa Infobae)

3-Tener un adecuado descanso

Para disminuir nuestros antojos y deseo constante de azúcar, aunque no parezca que guarde relación, es crucial dormir entre 7 y 8 horas cada noche para preservar un equilibrio hormonal que controle el hambre.

La insuficiencia de descanso puede modificar hormonas específicas, como la leptina y la grelina, encargadas de gestionar los deseos de comer, lo cual puede incrementar nuestra necesidad de azúcar.

Un buen descanso es vital para controlar las hormonas que regulan el apetito (Imagen ilustrativa Infobae)

4. Comer en porciones

Es crucial que quienes tienen afición por los dulces y aquellos que gustan de disfrutar ocasionalmente de un capricho, mantengan atención en la moderación de las porciones para prevenir el consumo excesivo.

También se aconseja remplazar los alimentos de azúcar artificial o añadida por pequeñas raciones de alimentos de azúcar naturales tales como la fruta.

La fruta es un buen sustituto de los alimentos dulces que solemos consumir (Imagen ilustrativa Infobae)

¿Qué pasa si dejo consumir azúcar?

La eliminación de azúcares añadidos de la dieta puede causar síntomas de abstinencia en algunas personas, dada la naturaleza potencialmente adictiva de estos ingredientes.

Sin embargo, los expertos sugieren que a largo plazo, los beneficios superan los inconvenientes iniciales. Recomiendan un enfoque gradual para reducir el consumo de azúcar junto con la incorporación de alimentos integrales que ayuden a minimizar los antojos y mejorar el estado general de salud.

Las investigaciones y las declaraciones de profesionales en la materia coinciden en que dejar el azúcar añadido no solo reduce el riesgo de problemas de salud significativos sino que también mejora la calidad de vida al promover una mayor energía y bienestar general.

El azúcar, aunque popular en la cocina moderna para endulzar una amplia variedad de comidas y bebidas, ha sido señalado por sus efectos adversos, motivando a muchos a reconsiderar su lugar en la dieta cotidiana.