Ellos fueron los pioneros en el tráfico de drogas en el estado de Sinaloa

Jorge Favela, Eduardo Fernández y Pedro Avilés Pérez, fueron los iniciadores en la siembra de marihuana y adormidera

Los pioneros en el tráfico de drogas en Sinaloa (Infobae)

Jorge Favela, Eduardo Fernández, alias ‘Don Lalo’, así como Pedro Avilés Pérez, ‘El León de la Sierra’, fueron los iniciadores en la siembra y tráfico de drogas, comenzando la cosecha de marihuana, así como heroína, cuyo destino era hacia Estados Unidos.

Era a mediados de los años 60, los narcotraficantes que ahora son conocidos aún no comenzaban e incluso había quienes aún no nacían, es por ello que ‘El León de Sierra’ ha sido considerado como uno de los fundadores del Cártel de Sinaloa, al ser quien fincó las bases.

“Durante esos años, el complejo mundo de las drogas se reduce a los nombres de algunos cuantos, quienes son el antecedente de lo que luego serían los capos, se mencionan los nombres de Jorge Favela, Eduardo Fernández, apodado ‘Don Lalo’ y Pedro Avilés Pérez, quienes se encargan del negocio, un término que hasta ayer y hoy, es uno de los eufemismos más comunes para referirse al tráfico de drogas”, se lee en el libro de Diego Enrique Osorno, ‘Bienvenido a Sinaloa’.

Pedro Avilés Pérez fue uno de los pioneros en el trasiego internacional de drogas en México. (X/@HistoriaNarco)

Por muchos años surgió el rumor de que las autoridades habían seleccionado la sierra de Sinaloa para la siembra de droga debido al clima que tiene, pero esta versión siempre ha sido desmentida, pues otros estados, como Michoacán y Guerrero, donde se produce la marihuana.

‘Don Lalo’ fue uno de los primeros capos del narcotráfico, mucho antes de que las clicas fueran consideradas como cárteles o bandas del crimen organizado, su auge lo tuvo con la producción de amapola, a través de la goma de opio.

(Foto: X/@VanessaFelixmx)

En estas zonas de Badiraguato se sembraba droga

De acuerdo con datos recolectados por el periodista Diego Enrique Osorno, los sitio en la sierra sinaloense ocupados para la siembra de droga eran Cañón de Paredes Bocaragua, Cañón de la Vainilla, Barranco de Otatita, Barranco el Rincón, Barranco de Agua Caliente, Barranco El Chipel, Barranco las Tranquilitas, Barranco Guamúchil, Arroyo Soledad, Barranco el Bruco, Arroyo Bamopa, Barranco Naranjitos, Barranco Lasarillas, Barranca El Toro, Arroyo Tecoripa, El Cerrito, Barranco de San Pedro, Barranco de Santa Rosalía, Arroyo Batocomilo, Rancho los Algodones, Arroyo Guajolote, Ladrillera y Arroyo de San Antonio.

De ahí se cosechaban grandes cantidades de marihuana y adormidera, los cuales tenían como destino Estados Unidos, a través de la frontera de Nuevo Laredo, Tamaulipas.

Jorge Moreno Chauvet, ‘El Rey de la Heroína, fue el responsable del traslado de droga por ese camino a mediados de lo años 60.