Esto fue lo que hizo el hijo de Amado Carrillo y su madre tras el deceso de ‘El Señor de los Cielos’

Vicente Carrillo Leyva, ‘El Ingeniero’, uno de los hijos más conocidos de Amado, ‘El Señor de los Cielos’, relató que tras el repentino deceso del capo comenzó a movilizarse para recuperar parte de la fortuna que dejó, sin embargo, en ese proceso fue víctima de rechazo de algunas personas e incluso de su familia, quienes negaban la existencia de algunos bienes.

Tanto su madre como Vicente se dedicaron principalmente a buscar dinero en las cajas fuertes que Amado tenía escondidas, donde solo hallaron 7 millones de dólares, pero faltaba buscar en sus propiedades en inversiones.

“Carrillo Leyva señaló que tras la muerte de su padre, en 1997, él, su madre y sus hermanos se pusieron a buscar dinero en las cajas fuertes que Amado tenía escondidas, pero no encontraron más que 7 millones de dólares, ‘El Señor de los Cielos’ era tan moderno que eso de las caletas donde los narcos colombianos y mexicanos enterraban el dinero, le parecía pasado de moda y poco práctico”, se lee en el libro de Anabel Hernández, ‘Los Señores del Narco’.

Anabel Hernández en su libro ‘Los Señores del narco’ argumentó que Vicente Carrillo Leyva parecía abonero al ir a consultar a socios de su padre en negocios lícitos sobre el capital que habría invertido, pero al ser un narcotraficante siempre le comentaban que fue confiscado o que las autoridades lo tienen en su poder.

‘El Ingeniero’ incluso fue con su tío y tocayo ‘El Viceroy’ para los bienes que le correspondía a la familia, a lo cual el nuevo líder del Cártel de Juárez le argumento que no tenía nada.

“Como abonero, Vicente Carrillo Leyva fue el encargado de ir con ‘El Viceroy’ y los socios de su padre para exigir los bienes que le correspondía a la familia, dice solo obtuvo un palmo de narices, el nuevo jefe del Cártel le dijo que Amado no tenía bienes, los que existían fueron incautados o vendidos para pagar deudas, no había nada que reclamar, el hijo de ‘El Señor de los Cielos’, siguió tocando puertas y en 1998, se reunió con Juan Alberto Zepeda Méndez, presunto testaferro de su padre y secretario particular del empresario mexicano Jaime Camil Garza, amigo del entonces presidente Ernesto Zedillo, Vicente Carrillo Leyva sabía que su padre había comprado acciones del grupo financiero Anáhuac por 30 millones de dólares y quería la devolución del dinero, la empresa financiera tenía más de 3 años en operaciones”.

Carrillo Leyva estuvo en varias partes donde su padre tenía inversiones y fue como se acercó al testaferro del capo, Zepeda Méndez, quien al momento de ser interrogado sobre la fortuna que dispuso su progenitor dijo que era imposible de recuperar, aprovechándose de la inexperiencia del joven de entonces 21 años de edad.

“Cuando Carrillo Leyva le pidió a Zepeda Méndez, este evadió sus compromisos, señalando que la Comisión Nacional Bancaria intervino, por lo que sería imposible recuperar el capital, que suerte que solo era un junior, de haber tenido el temperamento de su padre, Zepeda Méndez no habría amanecido”.