En los últimos días, la Ciudad de México experimentó diversos microsismos, generando preocupación entre los habitantes y los expertos. Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) identificaron una nueva falla geológica en la zona de Plateros-Mixcoac como la posible causa de estos eventos.
El epicentro de estos microsismos se registraron en las alcaldías Álvaro Obregón, Benito Juárez y Magdalena Contreras. Según los científicos de la UNAM, el origen de estas fracturas se relaciona con el contraste entre los materiales volcánicos y los de relleno del antiguo lago de la ciudad.
Además, el proceso de extracción de agua exacerbó las debilidades preexistentes en el suelo, sumado al estrés hídrico a su máxima capacidad, ha ocasionado la compactación del subsuelo, manifestando o propagando irregularidades que ya existían.
Los especialistas advierten que la Ciudad de México se hunde a un ritmo promedio de 20 a 30 centímetros al año. Estos desplazamientos deben ser considerados en un plan de reconstrucción a corto y mediano plazo para garantizar la seguridad de la población y la estabilidad estructural de la ciudad.
¿Cuántas fallas se tiene registro?
La falla Plateros-Mixcoac no es la única amenaza. Un estudio del Centro de Geociencias de la UNAM ha revelado cuatro fallas geológicas adicionales que podrían estar afectando a la capital del país.
- Falla Mixhuca: Se extiende desde la calle República de Uruguay, en la alcaldía Cuauhtémoc, hasta el Parque Ecológico de Cuemanco, en Xochimilco.
- Falla Santa Catarina: Va en Juan Patricio Morelete Ruíz, en Iztapalapa, y cruza la Sierra de Santa Catarina, en los límites con la alcaldía Tláhuac.
- Falla San Lorenzo Tezonco: Comienza en Canal Río Churubusco, en Iztapalapa, y se extiende hasta el municipio de Nezahualcóyotl, casi a la altura del Bordo de Xochiaca.
- Falla Copilco: Desde Copilco, en Coyoacán, hasta la colonia Bosques de Chapultepec en la alcaldía Miguel Hidalgo.
Expertos enfatizan la necesidad de acciones preventivas inmediatas. Ante el riesgo sísmico y el hundimiento continuo de la ciudad, un plan integral de reconstrucción debe abordar no solo la seguridad estructural de edificaciones, sino también la gestión sostenible del agua y el monitoreo constante de las fallas geológicas.
La información proporcionada por este estudio es crucial para la planificación urbana y la seguridad de los habitantes de la Ciudad de México, instando a las autoridades a tomar medidas urgentes para mitigar los riesgos y garantizar la resiliencia de la ciudad ante eventos sísmicos futuros.