Pese a las expectativas, las recientes lluvias registradas en la Ciudad de México el pasado 17 de febrero no han resultado en una mejoría significativa en los niveles de almacenamiento del Sistema Cutzamala, crucial para el abastecimiento de agua en el Valle de México y que atraviesa por una de sus peores crisis hídricas.
A pesar de la esperanza depositada por los ciudadanos, manifestada en redes sociales con numerosos memes y publicaciones de agradecimiento a Tláloc, dios de la lluvia por las precipitaciones del pasado sábado, la realidad es otra, por lo que los ciudadanos aún están en alerta ante la llegada del llamado “Día Cero”, pronosticado al 26 de junio.
¿Cuál es el nivel de las presas del Sistema Cutzamala?
El reporte de llenado de las presas muestra que las precipitaciones han tenido un efecto limitado al menos en los tres embalses que nutren al Sistema Cutzamala: la presa Villa Victoria, Valle de Bravo y el Bosque.
Según datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) actualizados al lunes 19 de febrero, antes de las lluvias del sábado la Presa Villa Victoria registraba 56,536 hectómetros cúbicos de agua, llena sólo a un 30 por ciento de su capacidad total.
La presa Valle de Bravo reportó 126, 301 hectómetros cúbicos, representando un 32 por ciento de su capacidad; mientras que la presa El Bosque tenía 119,288 hectómetros cúbicos, o sea, un 59 por ciento de llenado.
Días después, el 20 de febrero, los niveles apenas mostraron cambios e incluso en algunos hasta descendieron. La presa Villa Victoria descendió ligeramente a 56,015 hectómetros cúbicos, manteniéndose en un 30 por ciento de su capacidad.
La presa Valle de Bravo aumentó a 126, 575 hectómetros cúbicos, todavía al 32 por ciento; mientras que la presa El Bosque registró una mínima disminución a 118,586 hectómetros cúbicos, conservando el 59 por ciento de llenado.
Con ello se tiene que el llenado del Sistema Cutzamala se encuentra actualmente en un 40.33 por ciento del 100 por ciento de su capacidad total.
Estas cifras reflejan cómo, aún ante eventos de lluvia, el Sistema Cutzamala sigue enfrentando desafíos significativos, exacerbados por el cambio climático, el aumento del consumo debido al crecimiento poblacional y los efectos de la deforestación.
La crisis hídrica que amenaza con alcanzar el “Día Cero” el 26 de junio, donde se teme una severa escasez de agua, destaca la urgencia de implementar medidas para gestionar y conservar los recursos hídricos.
El Sistema Cutzamala, pieza clave en la infraestructura hídrica de México desde su construcción en la década de los 70, enfrenta la necesidad de adaptarse y superar la sobreexplotación y los desafíos impuestos por el cambio en los patrones de precipitación.
Su mantenimiento y modernización son indispensables para asegurar el suministro de agua a millones de habitantes en la región, requiriendo atención y acciones inmediatas frente a una de las peores crisis hídricas previstas en la historia de México.