Los conflictos conocidos como Los Disturbios de Atenco en 2006 se tradujeron en enfrentamientos violentos entre la Policía Federal Preventiva, Agencia de Seguridad Estatal del Estado de México y los habitantes de San Salvador Atenco, resultado de la movilización contra un proyecto de construcción de aeropuerto.
Los disturbios iniciaron como una protesta de el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) apoyados por miembros de La Otra Campaña del EZLN, en oposición al anuncio del presidente Vicente Fox sobre la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en terrenos agrícolas de Texcoco.
Este hecho marcó el comienzo de una serie de movilizaciones y confrontaciones que eventualmente culminarían con los eventos violentos de mayo de 2006.
C4 Jiménez en la cobertura de Atenco
En una entrevista para el canal Criminalmente, el destacado conductor Carlos Jiménez, conocido como C4 Jiménez rememoró uno de los episodios más impactantes de su carrera y de las cosas que más le ayudaron en su decisión de convertirse en periodista de seguridad: su cobertura del conflicto en San Salvador Atenco.
Este suceso, ocurrido durante la administración de Vicente Fox, marcó un momento crucial en la historia del país, donde la lucha por la tierra se convirtió en un enfrentamiento violento entre las autoridades y los comuneros.
Jiménez recordó con detalle cómo surgió el conflicto: “Los comuneros de San Salvador no querían vender sus tierras para la construcción del aeropuerto de Texcoco”. Este desacuerdo desencadenó una serie de eventos que culminaron en un enfrentamiento armado entre la policía y los manifestantes.
“Secuestraron unas pipas de gas y las colocaron en la carretera, amenazando con explotarlas”, describió. Ante esta situación de peligro, muchos reporteros se negaron a cubrir el conflicto, pero para Carlos, fue una oportunidad para demostrar su gusto por este tipo de sucesos.
“El jefe me prestó su carro nuevecito y allí fui yo”, relató Jiménez. A pesar de las adversidades, logró llegar al lugar del conflicto y presenciar de primera mano la tensión y el caos que reinaban en las calles de Atenco.
“Las llantas quemándose, la gente con antorchas, los manifestantes con machetes... era como estar en una película”, recordó. A medida que avanzaba hacia el centro del pueblo, se encontró con escenas aún más impactantes, como policías atados y amenazados por los manifestantes.
“Estaban amarrados y amenazados con ser quemados si las autoridades no respondían a sus demandas”, describió Jiménez. A pesar del peligro, continuó con su labor periodística, consciente de la importancia de documentar estos eventos para informar a la sociedad.
A pesar de lo impactante que fue esta historia que marcó a la sociedad mexicana, el periodista resaltó que fue un punto de inflexión para saber que ese tipo de noticias era lo que le gustaría documentar en su carrera, además de que fueron los mismos pobladores quienes dejaron que la prensa tuviera acceso al lugar para que pudieran ellos contar su versión de los hechos.
Además, aparte de Atenco, su primera cobertura en cuestiones de seguridad fue un enfrentamiento entre gente del Barrio de Tepito con elementos de la Policía de la CDMX, ambos hechos fue lo que le llamó la atención de dedicarse a la cobertura de casos de seguridad.