¿El 2 de febrero es feriado? Esto es lo que dice la ley

El Día de la Candelaria es una fecha conmemorativa en México que combina tradiciones católicas con prehispánicas

La Ley Federal del Trabajo establece varios días de descanso oficial. (Jesús Avilés/Infobae)

En México, el 2 de febrero es una fecha relevante en el calendario católico que ha escalado a ser una tradición nacional. La conmemoración a la Virgen de la Candelaria es celebrada por las y los mexicanos con la repartición de los tamales, la “deuda” pagada por la repartición de la tradicional Rosca de Reyes.

Esta celebración ha sido contemplada en el imaginario social como una fecha destacable que ha llegado a compararse con el 12 de diciembre, Día de la Virgen de Guadalupe, el cual es considerado un día festivo en donde algunas actividades cotidianas son suspendidas. Ante esto, queda la duda sobre si el 2 de febrero cumple las mismas características para ser considerado un “día libre” en la cotidianidad mexicana.

Es importante destacar que algunos días del año son considerados días festivos, no obstante, estos no son catalogados para suspender actividades laborales o estudiantiles.

Qué dice la ley sobre la festividad de la Virgen de la Candelaria

El 2 de febrero es considerado un día festivo en el calendario, no obstante, no cuenta con las condiciones para enmarcarlo como un día feriado y mucho menos como un día de asueto, por lo que tanto trabajadores como estudiantes deberán asistir a sus deberes.

Los días feriados en México, en donde existe una posibilidad de faltar según la consideración del trabajador o institución son:

  • jueves 28 y viernes 29 de marzo: con motivo de la celebración católica de Semana Santa
  • 10 de mayo: Día de las madres.
  • 2 de noviembre: Día de muertos.
  • 12 de diciembre: Día de la Virgen de Guadalupe.
  • 24 de diciembre: Nochebuena.
  • 31 de diciembre: Noche vieja.
Turistas disfrutando de días libres en una soleada playa de México - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Por su parte, los días de descanso obligatorio en el país son:

I. El 1o. de enero;

II. El primer lunes de febrero en conmemoración del 5 de febrero;

III. El tercer lunes de marzo en conmemoración del 21 de marzo;

IV. El 1o. de mayo;

V. El 16 de septiembre

VI. El tercer lunes de noviembre en conmemoración del 20 de noviembre;

VII. El 1o. de octubre de cada seis años, cuando corresponda a la transmisión del Poder Ejecutivo Federal;

VIII. El 25 de diciembre, y

IX. El que determinen las leyes federales y locales electorales, en el caso de elecciones ordinarias, para efectuar la jornada electoral.

Por qué se celebra el 2 de febrero

Creyentes católicos visten a sus Niños Dioses con motivo del Día de la Candelaria. (CAROLINA JIMÉNEZ/CUARTOSCURO)

El Día de la Candelaria tiene sus orígenes en la tradición católica que conmemora la presentación de Jesús en el templo, así como la purificación de la Virgen María, 40 días después de Navidad. Esta fecha marca el final del ciclo de la Navidad dentro del calendario litúrgico.

En México, el Día de la Candelaria se ha fusionado también con tradiciones prehispánicas relacionadas con el ciclo agrícola, especialmente el inicio de la preparación de la tierra para la siembra. La festividad incluye diversos elementos culturales y religiosos.

La celebración inicia con la bendición de candelas o velas en las iglesias, simbolizando la luz de Cristo y su presencia en la vida de los creyentes. Estas velas bendecidas se llevan a casa como protectoras.

Otro componente fundamental de la celebración es la tradición de “levantar” al Niño Dios. Quienes hayan encontrado el muñeco del niño en la rosca de Reyes, ofrecida el 6 de enero, tienen la responsabilidad de vestir una figura del Niño Dios y presentarlo en la iglesia para su bendición, para luego organizar una fiesta con familiares y amigos.

FOTO: ISABEL MATEOS /CUARTOSCURO.COM

La comida juega un papel importante en esta festividad. Quienes recibieron al Niño Dios durante la Epifanía suelen preparar tamales y atole para los asistentes como parte de la celebración. Estos platillos son significativos en la cultura mexicana y su preparación y consumo en esta fecha refuerza la unión familiar y comunitaria, así como la continuidad de las tradiciones.