Cómo darme de alta en una AFORE por primera vez

Cada vez son más los jóvenes que se sienten preocupados por su futuro, específicamente con cómo obtendrán dinero para solventar sus gastos cuando lleguen a una edad en la que ya no puedan laborar, es por ello, que la opción más viable es tramitar una Afore para obtener algunos ingresos para aquel entonces.

La Afore es una institución que se encarga de llevar la administración de fondos para el retiro de los trabajadores y tiene la función de ahorrar a largo plazo, para que al llegar a una edad avanzada se pueda tener dinero para cubrir las necesidades básicas. Así que si ya te encuentras trabajando y deseas comenzar a ahorrar para tu futuro, a continuación te compartimos todo lo que necesitas saber para llevar a cabo el trámite.

Es importante detallar que cada trabajador tiene una cuenta que es llamada “individual” que es personal y única, la cual tiene como función que a lo largo de la vida laboral pueda nutrirse con aportaciones del patrón, gobierno y el propio empleado.

Las aportaciones que se lleguen a realizar a la cuenta individual dependen completamente del salario de cada persona, además de que cada Afore se divide en cuatro subcuentas entre las que se puede ir seleccionando.

La cuatro subcuentas son las siguientes:

- Vivienda: el patrón realiza aportaciones de forma bimestral, las cuales tienen que ser lo equivalente al cinco por ciento del salario base de cotización de los trabajadores, incluso, el saldo que se vaya acumulando puede ser utilizado para obtener un crédito Infonavit.

- Aportaciones adicionales: lo que se pretende con este apartado es aumentar el monto correspondiente a la pensión, por lo que pueden ser aportaciones que puede realizar tanto el patrón como el trabajador.

- Retiro, vejez y cesantía: la aportación que compone a esta subcuenta es entregada por el propio empleado, el patrón y el gobierno.

- Aportaciones voluntarias: en esta subcuenta, como su nombre lo indica, se trata de las aportaciones que el trabajador realiza de manera voluntaria. Es importante destacar que mientras más depósitos se realicen, el rendimiento de los ingresos será mayor.

El primer paso es seleccionar la Afore que se ha considerado como la más conveniente para que se administre el ahorro de la persona al momento de su jubilación.

Una vez que se haya determinado cuál será la Afore ideal, lo que se debe hacer es ponerse en contacto para solicitar una cita y posteriormente, acudir a la oficina más cercana para llegar los siguientes documentos:

- Identificación Oficial Vigente

- Clave Única de Registro de Población (CURP)

- Número de Seguridad Social (NSS)

- Número de Registro Federal de Contribuyentes (RFC)

- Comprobante de domicilio que no exceda de los tres meses de antigüedad

Una vez que se acuda al lugar con los documentos antes mencionados, en las oficinas de la administradora se realizan una serie de pruebas para obtener datos biométricos con la finalidad de validar la identidad de la persona, así como adquirir sus huellas dactilares, firma y fotografía.

Cuando se haya logrado terminar con el trámite la administradora deberá entregar una constancia de registro en forma física o por medio de un correo electrónico. Seis días hábiles después se informará acerca del estatus del trámite, es decir, se notificará si se realizó de manera exitosa o si hay que corregir alguno de los datos registrados.

En el caso de que la solicitud haya sido aceptada, la administradora deberá enviar una constancia de Registro al domicilio o al correo electrónico que se haya proporcionado. Por otro lado, en el caso de que haya sido rechazado se deberá avisar por medio de un correo electrónico o por medio de un documento enviado al domicilio en el que se expliquen los motivos por los que se rechazó la solicitud.