Benito ―la jirafa de 3 años que arribó al Parque Central de Ciudad Juárez proveniente de un zoológico en Sinaloa en mayo de 2023 y que vivió durante meses en malas condiciones― finalmente está siendo trasladado a un nuevo hogar en Africam Safari de Puebla.
El caso de la jirafa Benito robó reflectores en México luego de que el colectivo “Salvemos a Benito” denunciara que el animal estaba expuesto al clima extremo de Chihuahua, primero en un calor infernal y luego al frío del severo invierno.
Sin embargo, este domingo 21 de enero finalmente comenzó la travesía de la jirafa a su nuevo hogar, pero antes de llegar primero deberá lidiar con varios obstáculos en un camino que no será nada fácil.
Para darle mayor comodidad, Benito fue colocado en una caja telescópica, que es un tipo de embalaje que generalmente consta de dos piezas, una tapa y una base, que se utiliza con frecuencia para productos que requieren una protección adicional durante el transporte o almacenamiento, debido a su capacidad de ajustarse y proporcionar una capa extra de cartón en los lados. Este diseño permite adaptar la altura de la caja de manera más precisa a las dimensiones del producto, ofreciendo así un empaque más seguro y a medida.
A través de un video compartido por el grupo “Salvemos a Benito”, el director del parque Africam Safari, Frank Camacho, detalló que dentro de la caja Benito va a 16 grados centígrados, tiene una cama de alfalfa en el piso a fin de darle calor y que absorba la humedad, con una superficie antiderrapante, y fruta y agua para que se alimente en el camino.
El viaje hacia Puebla comenzó después de que la jirafa logró ingresar con éxito a la caja telescópica y ésta a su vez fue subida con una grúa al tráiler que la llevará, en donde pasará entre 35 a 40 horas escoltada por elementos de la Guardia Nacional antes de llegar a su nuevo destino.
La comitiva viaja a una velocidad límite permitida, a menos que Benito se altere entonces deberán bajar la velocidad. Cabe apuntar que el animal no fue sedado para ser trasladado.
Benito no estará solo, pues con él también viaja una comitiva de veterinarios y especialistas en jirafas para garantizar que el animal se mantenga en buen estado durante el traslado; al tiempo que al interior de su jaula fueron instaladas cámaras para monitorearlo.
Contra los obstáculos
Desde el primer momento en el que se montó a la jirafa Benito a la caja telescópica y ésta a la grúa en la que es trasladado, el primer obstáculo con el que se encontraron fueron los cables de luz y teléfonos, pues el contenedor tiene una altura de cinco metros.
Sin embargo, Frank Camacho ha comentado en diversas entrevistas a medios de comunicación que el techo de la caja telescópica podrá subir y bajar por si en la ruta se encuentran con algún tipo de obstáculo: “Es una forma muy segura, no se lastima, no le entra el viento en los ojos, va protegido”, mencionó.
Quienes lleguen a encontrarse con la comitiva de la jirafa sobre la carretera no podrán divisar al animal, pues aunque la parte superior del remolque es una estructura metálica abierta, está cubierta por una lona que sirve para aislar al animal del frío, el viento, la lluvia y el ruido externo.
La jirafa recorrerá 1900 kilómetros, haciendo varias escalas. Al llegar a su nuevo hogar Benito deberá hacer cuarentena, pues se le han detectado varias bacterias en sus heces fecales; posteriormente iniciará su adaptación, primero con una jirafa bebé y después con una manada.