¿Otaku y emo? Joven recuerda canción de Pxndx en Japonés y se vuelve viral

“No sabía que lo necesitaba escuchar”; fueron las reacciones tras la versión del tema de José Madero en el idioma asiático

La joven continúa siendo fan de Pxndx a pesar de su separación. Crédito: Cuartoscuro / TikTok: katsiiiz

Una de las modas que marcaron la década de los años 2000 y parte de los 2010 fueron los conocidos como Emos, algo que surgió en Estados Unidos con mayor anterioridad, pero que poco a poco se fue extendiendo hasta llegar a los jóvenes mexicanos quienes adoptaron esta cultura formando una nueva tribu urbana.

Sin embargo, es sumamente común que después de un tiempo las ideas y pensamientos cambien, por ello es que finalmente desapareció este estilo de vida que estaba marcado por vestimenta negra, rosa, calaveras con moños, medias de red, flecos que ocultaban parte del rostro, principalmente los ojos, entre otras cosas.

Uno de los grupos que formó una parte trascendental dentro de esta cultura fue Pxndx, caracterizado por sus letras de dolor, odio y sufrimiento que supuestamente acompañaban a la perfección a las ideas que surgían de la mente de las personas “emos” que inclusive, algunos, adoptaron la actividad de cortarse a sí mismos con pequeñas navajas, sin importar el riesgo.

Los emos surgieron en la década de los años 2000. (Archivo)

Años después surgió la cultura relacionada con el anime y lo relacionado con Japón, sea comida, dulces, vestimenta, proyectos cinematográficos, series, animaciones y hasta juegos de cartas o coleccionables. Fueron denominados, en México, como otakus, una palabra proveniente del idioma japonés.

Ellos se encuentran vigentes actualmente y pueden ser distinguidos con facilidad pues en sus muchas variantes pueden vestir como los personajes que admiran o con temáticas de animales, como orejitas de gato, entre otros accesorios.

Pero por qué fueron mencionados en esta publicación. Porque existen personas que con el transcurso de los años adoptaron las dos culturas e ideologías provenientes tanto de los otakus como de los emos y fue así que surgió una nueva versión de un tema famoso de Pxndx: Los Malaventurados No Lloran.

Pero de una forma totalmente reinterpretada pues surgió una versión donde se tradujo la letra completamente al idioma japonés y una chica la recordó volviéndose viral en las redes sociales y asegurando que ahora ella puede escuchar con tranquilidad a Pxndx, sin contrariar su ideología otaku.

La chica recordó al grupo que fue liderado por José Madero Crédito: TikTok: katsiiiz

Inmediatamente se activaron los recuerdos de muchas personas quienes aplaudieron la versión en japonés de Los Malaventurados No Lloran, asegurando que no la conocían y que desconocían cómo habían podido vivir sin haberla escuchado con anterioridad.

Y por lo tanto pidieron que se compartiera la versión completa la cuál existe en múltiples videos en la plataforma digital YouTube, pero sin que se pudiera rastrear a un autor en específico pues son diferentes las cuentas que lo publicaron y no otorgaron algún tipo de crédito.

“Los otakus no lloran muy buena”, “Lo más genial es que el cabello es ajustable! ahora soy emo, ahora no lo soy”, “no sabía que necesitaba Pxndx japonés”, “la versión que no sabia que necesitaba”, “yo lo sabía que los emos se volvieron Otakus”, “JAJAJAJAJA no sabía que necesitaba escuchar eso en japonés”, fueron parte de los comentarios que recibió.

El legado musical de Pepe Madero sigue creciendo más allá de PXNDX, aunque para muchos sólo es una extensión del mismo. (Marlem Suárez @barbieperiodista)

¿Emos se convirtieron en otakus?

Dentro de los comentarios que recibió el video de Pxndx en japonés surgió una hipótesis sin buscarla y fue que aquellos que eran emos en su juventud, posteriormente se convirtieron en otakus, adoptando las nuevas modas y estilos de vida.

Lo que parecía como una broma que sólo quedaría en eso, fue aumentando pues de acuerdo a lo que algunos comentaron, en efecto, en su pasado formaron parte de la tribu urbana caracterizada por el fleco sobre los ojos para después elogiar y alabar lo proveniente de Japón, lo que desató sorpresa entre aquellos que lo leyeron.