¿Qué tiene el hijo de Federica Quijano? Éste es el trastorno que padece el adolescente

Hace unos días trascendió que Federica Quijano fue golpeada por su hijo adolescente durante una crisis. La cantante de Kabah tuvo que ir al hospital y salió de allí con un cabestrillo para el brazo, debido a que sufrió de la inflación de un tendón.

El incidente sucedió cuando su hijo perdió el control y ella en su afán de tratar contenerlo, recibió un fuerte cabezazo del adolescente en el brazo. El resultado fue una tendinitis, aunque es importante recordar que su hijo no tuvo intenciones de lastimarla, sino que perdió el control durante la fuerte crisis emocional que sufrió.

Lo anterior ha llevado a muchos a preguntarse qué es lo que sucede con su hijo adolescente llamado Sebastian. Qué tipo de padecimiento o enfermedad posee y si se trata de algo potencialmente peligroso para su propia seguridad, la de su madre y las demás personas a su alrededor.

Federica Quijano siempre quiso convertirse en madre, pero la naturaleza y el destino decidieron que ella no podría tener hijos. Su hermano Apio reveló durante su estancia en La casa de los famosos qué fue lo que le sucedió físicamente a la cantante que le impidió tener hijos propios.

“No pudo tener hijos por la endometriosis. [...] La endometriosis es cuando se empiezan a crear pólipos o como pelotitas en los ovarios y empiezan a afectar las trompas y son dolores terribles, tienen que ir quitando las bolas, pero llega un punto en el que ya no pueden y se les atrofian y ya no puedes”, le explicó a Emilio.

Por tanto, la artista observó que la adopción era la forma más idónea de poder convertirse en madre. La idea llegó a ella luego de leer la noticia de un bebé que fue abandonado en la basura, por lo que comenzó a investigar y se dirigió al albergue a donde llevaron a aquel niño.

Una vez en dicho lugar se enteró que la adopción era posible, a pesar de no contar con una pareja, un requisito que es imperativo en otras instituciones como el DIF. En el albergue de la Procuraduría del Distrito Federal se sometió a exámenes médicos, estudios socioeconómicos, psicológicos, físicos y trámites como el de una carta de no antecedentes penales.

Después de un proceso tedioso que duró aproximadamente siete meses, le informaron que su solicitud habría sido estudiada y aprobada. Le informaron que se convertiría en la madre de una niña de 16 años. En este lugar ella no podía escoger al bebé, dado que se rigen por análisis y estudios concienzudos de compatibilidad genética.

Dos años después de haber adoptado a María, el nombre de la niña, finalmente pudo adoptar a su segundo hijo Sebastián. El proceso fue más sencillo porque ya tenía antecedentes, por lo que se convirtió en madre de un pequeño de año y medio llamado Sebastián.

“A los tres años de un día para otro lo perdí. Empezó un Viacrucis, lo más terrible que le pueda pasar a un papá o mamá”, le dijo Federica a Milenio.

Luego de una caída, Sebastián fue diagnosticado con autismo. El autismo, también conocido como trastorno del espectro autista (TEA), es una condición neurológica y de desarrollo que comienza en la infancia y perdura durante toda la vida. Se caracteriza por una variedad de síntomas y niveles de discapacidad que pueden manifestarse en dificultades en la comunicación y la interacción social, así como por patrones repetitivos de comportamiento, intereses o actividades. No existe una única causa para el autismo; se cree que factores genéticos y ambientales interactúan de maneras complejas para influir en el desarrollo del trastorno.

“Es una lucha constante de sentimientos y retos hoy por la parte física me duele mucho el brazo pero me duele más el alma, el corazón, de repente ver tan lejos a mi hijo. Sentirme tan ajena a lo que está sintiendo”, dijo la cantante por redes sociales.

Las personas con autismo pueden presentar una amplia gama de capacidades. Algunos pueden vivir de manera independiente, mientras que otros pueden requerir apoyo significativo en su vida diaria. No todos los individuos muestran habilidades excepcionales en áreas específicas; la noción de “sabio autista” es un estereotipo que no representa a la mayoría de las personas con este trastorno. La detección temprana y las intervenciones adaptadas a las necesidades individuales pueden contribuir a mejorar significativamente el bienestar y el desarrollo de las habilidades sociales y comunicativas.

“A veces como mamá azul es una montaña rusa, hay días en que Sebastián está increíble y que ves a tu hijo a los ojos y te corresponde, te ve, te abraza, te ama y tienes estos momentos que valoras muchísimo como mamá y otros en los que es una lucha constante de sentimientos”, afirmó Quijano.

Es fundamental fomentar la comprensión y la inclusión social de las personas con autismo, promoviendo un enfoque basado en los derechos y la dignidad de cada individuo. A nivel mundial, se realizan esfuerzos para aumentar la conciencia acerca del autismo, así como para mejorar los servicios de atención y apoyo. Organizaciones de la sociedad civil, profesionales de la salud e investigadores continúan trabajando para comprender mejor el trastorno y para crear ambientes más inclusivos y respetuosos para las personas con TEA.