Box en la cárcel: él es narco que entrenaba con Julio César Chavez tras las rejas

El narco al servicio de los Arellano Félix que fue asesinado frente a Julio César Chávez por cambiar de bando y traficar marihuana para El Chapo Guzmán

Su nombre era Jesús “El Bebé” Gallardo, una promesa del boxeo mexicano, figura e ídolo en Tijuana -tierra de pugilistas- ágil de manos y piernas, con una zurda temida hasta para el campeón mundial Julio César Chávez; pero también era uno de los llamados narcojuniors al servicio del Cártel de los Arellano Félix.

Carismático y de una familia acomodada de la ciudad fronteriza, “El Bebé” Gallardo era querido por muchos tanto en el ring como al interior del Cártel de los Arellano Félix y en la prisión, dónde a menudo recibía las visitas de Julio César Chávez para pelear ante el clamor de los reclusos.

El periodista Jesús Blancornelas reveló en su libro El Cártel que cada que el campeón mexicano visitaba a su amigo en el penal “eran buenas las exhibiciones (...) como si fuera una pelea de campeonato y aquello ponía un toque de alegría en la prisión”; aunque Julio César Chávez tenía que contenerse para no lastimar al “Bebé Gallardo”.

Después de abandonar la cárcel, Gallardo se sumó como sparring al equipo de Julio César Chávez hasta que pistoleros de los Arellano Félix lo siguieron hasta los baños del Hotel Holiday Inn en Toluca, Estado de México, y lo asesinaron. Era 1996.

Julio César salió vencedor en la pelea contra Mario "Azabache" Martínez (Foto: Twitter/ @DeportesHoy1)

Julio César Chávez y la esposa del “Bebé” Gallardo

Jesús Gallardo se retiró del boxeo con 28 peleas, 23 ganadas por la vía del nocaut y sólo tres derrotas; desde su debut profesional en 1984 dejó en el ring varias batallas memorables, una de ellas por el título nacional medio: “El Bebé” se levantó de la lona pese a estar gravemente lastimado y noqueó al favorito Francisco “Chango” Carballo.

Gallardo tenía todo para convertirse en una figura como Erik “El Terrible” Morales, Antonio Margarito, José “Dinamita” Estrada, Jackie Nava o Kenia Enríquez, todos ellos nacidos en Tijuana. Pero lo sedujo el poder y la vida del narco.

Después de su asesinato, atribuido a sus examigos y compañeros en el Cártel de los Arellano Félix (Emilio Valdés Mainero, Fabián Martínez, Merardo León y Fabián Reyes), su amigo, compadre y contrincante en el ring -Julio César Chávez- se caso con su difunta esposa, Myriam Escobar.

Chávez y Escobar contrajeron matrimonio en 2015, pero se dice que su historia de amor comenzó tras la muerte de “El Bebé” Gallardo, cuando el campeón mundial ayudó a la esposa e hijos de su compadre y con el tiempo se fueron enamorando.

Foto: Getty Images

Traicionar a los Arellano Félix

“El Bebé” Gallardo anunciado en las arenas de boxeo de Baja California era garantía para un lleno total; pero años más tarde sus pelos chinos, su cuerpo delgado y alto eran una mala copia de sus años de gloria. Fue también por esos años que lo comenzaron a ligar con los Arellano Félix y su nombre dejó de aparecer en el ring y se mudó a los periódicos que reportaban al crimen organizado.

Se cuenta que lo detuvieron porque Joaquín El Chapo Guzmán lo convenció de mover marihuana para él, algo que iba contra las reglas de Benjamín y Ramón Arellano Félix; pero sería el mismo ex líder del Cártel de Sinaloa quien lo traicionaría ante la Policía Federal.

Traicionar a los hermanos Arellano Félix significaba la muerte, por eso se planeó matarlo al interior de la cárcel; sin embargo, el carisma y la amistad con Julio César Chávez frenaron a los sicarios al interior del penal.

La noche del 9 de abril de 1996 Julio César Chávez y “El Bebé” Gallardo cenaban en Toluca; el segundo se paró al baño y nueve disparos le arrebataron la vida. Jamás se involucró el nombre de “El César del Boxeo” en el homicidio; de la víctima sólo se dijo que cuando lo detuvieron declaró que la marihuana era de Ramón Arellano Félix, lo que le valió una orden de aprehensión al sanguinario sicario que no perdonó la osadía y no descansó hasta asesinarlo.