El presidente de la Unión de Industriales del Estado de México, Francisco Cuevas Dobarganes, expresó su preocupación por el impacto del impuesto a la emisión de gases contaminantes en el 98% de las unidades económicas del estado.
Según Cuevas Dobarganes, el costo de los estudios de medición de emisiones resulta más oneroso que la misma cuota impositiva para estos establecimientos, lo que plantea un desafío financiero significativo.
El líder industrial reconoció la disposición de los diputados del Congreso mexiquense para realizar ajustes a la baja en los impuestos verdes para el próximo año. Esta acción responde a la solicitud previa de la industria, que manifestó su desacuerdo con las nuevas cuotas propuestas en el paquete fiscal.
Sin embargo, a pesar de ello, Cuevas Dobarganes señaló que el costo de cuantificar las emisiones contaminantes afecta de manera particular a las microempresas, ya que deben recurrir a laboratorios especializados, lo que implica un gasto adicional considerable.
¿Qué unidades económicas serán afectadas?
Esta medida fiscal, destinada a desincentivar la contaminación, está generando inquietud entre pequeñas empresas como panaderías, tortillerías, fondas, restaurantes y bares que serán los entes más afectados, destacó el líder empresarial.
“Creo que está bien, pero el tema es que a las microempresas les cuesta más la cuantificación que lo que pagan”, afirmó el presidente de la Unión de Industriales del Estado de México.
Aunque reconoce la importancia de que las empresas contaminantes contribuyan económicamente y de que este impuesto ayude a desalentar el uso de combustibles contaminantes, también advierte sobre posibles efectos adversos que podrían superar los beneficios previstos.
Si bien el aumento impositivo es moderado y entrará en vigor el en abril del 2024, Cuevas Dobarganes insiste en la necesidad de considerar una medida especial para las microempresas, proponiendo la aplicación de cuotas fijas.
Esta solicitud busca equilibrar la carga impositiva con la capacidad financiera de estos pequeños negocios, sin comprometer su operatividad y desarrollo, por lo cual destacó la importancia de encontrar un equilibrio entre la protección del medio ambiente y el impacto económico en las microempresas.
La propuesta de establecer cuotas fijas para estos negocios busca mitigar el desafío financiero que representa el costo de cuantificar las emisiones contaminantes, permitiendo así una contribución equitativa y sostenible al cuidado del entorno, sin afectar gravemente la viabilidad de los pequeños emprendimientos en el Estado de México.