El 30 de agosto de 2010, el gobierno del entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa dio un duro golpe contra el crimen organizado, en consecuencia de la llamada ‘guerra contra el narcotráfico’ que inició cuando tomó posesión de la silla presidencial. Aquel día, elementos de la extinta Policía Federal (PF) capturaron a Édgar Valdez Villarreal en una casa de campo ubicada en Cañada de Alfares; una localidad cercana al poblado de Salazar, en el Estado de México. Años más tarde, el narcotraficante expondría, a través de una carta, que su detención había sido resultado de una ‘persecución política’.
‘La Barbie’, identificado como un cruel y sanguinario miembro del Cártel de los Beltrán Leyva ―enemigos del Cártel de Sinaloa―, pasó dos años en la cárcel antes de culpar públicamente al panista de su detención, pero no por las razones que todas y todos creyeron en su momento.
La misiva a través de la cual expuso una red de corrupción al interior del Ejecutivo fue hecha pública por la periodista Anabel Hernández el martes 27 de noviembre de 2012, y fue difundida a través del diario Reforma y otros medios de comunicación, causando gran controversia.
Ella inicia de la siguiente manera:
“Quiero manifestar en primer lugar que no me acogí al programa de testigos protegidos, así mismo niego categóricamente los señalamientos y manifestaciones que refieren los elementos aprehensores respecto a la forma de cómo fue mi detención”.
En los próximos párrafos, ‘La Barbie’ aseguró que fue víctima de persecución política, toda vez que se negó a llegar a un acuerdo con el mandatario federal.
“Calderón Hinojosa instauró un acosamiento en contra de mi persona, por la razón de que el suscrito se negó a formar parte del acuerdo que el señor deseaba tener con todos los grupos de la delincuencia organizada, para lo cual, él personalmente realizó varias juntas para tener pláticas con grupos de delincuencia organizada”, se lee en la carta.
¿Con qué cárteles buscó un acuerdo Felipe Calderón?
De acuerdo con ‘La Barbie’, el segundo militante del PAN en llegar al Ejecutivo buscó un acuerdo con todos los cárteles de drogas poderosos en aquel entonces. Entre ellos destaca:
- Los Zetas.
- El Cártel del Golfo.
- El Cártel de Juárez.
- El Cártel de Sinaloa (específicamente con sus líderes, Ismael ‘El Mayo’ Zambada, Vicente Zambada Niebla y Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán.
- Y el Cártel de los Beltrán Leyva; razón por la que presuntamente buscó dialogar con Valdez Villarreal.
En la carta también se expuso que el gobierno federal realizó diversas juntas a través del general Mario Arturo Acosta Chaparro, quien se habría reunido con miembros de La Familia Michoacana por órdenes del presidente.
‘La Barbie’ aseguró que, al no haber respuesta de su parte, se instauró una persecución aguda en su contra, misma que tenía como objetivo su muerte y no su detención. En el mismo espacio, aprovechó para acusar que las autoridades catearon varias de sus casas sin una orden para hacerlo, además de robarle varias de sus pertenencias.
“Todo fue tapado por la PF. Es de hacer mención que pese a los antecedentes de Genaro García Luna ―a quien también acusó de haber recibido sobornos―, los cuales se encuentran en diversas causas penales y de los que el gobierno americano ya tiene conocimiento, (...) el presidente Felipe Calderón lo sostiene en su cargo sin que se ejerza acción penal en su contra”, concluye el escrito.
Pese a los señalamientos expuestos, ‘La Barbie’ continuó encarcelado y en octubre de 2015, ya durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, fue extraditado a Estados Unidos, donde se le requería para enfrentar cargos por narcotráfico.
En 2018 fue sentenciado a 49 años de cárcel y a pagar una multa de 192 millones de dólares.