Crecida del río Grijalva arrastró ataúdes de un panteón en Tabasco

Las fuertes lluvias ocasionadas por la fusión de la tormenta tropical Pilar y el frente frío número 8 causaron severas inundaciones en el estado de Tabasco, en donde la corriente del río Grijalva subió y se llevó consigo el panteón “El Cedral”.

De acuerdo con información de los medios locales, al menos una treintena de ataúdes terminaron en la orilla del río o en medio del agua, arrastrados por las corrientes con todo y restos.

Encargados del panteón ya habían denunciado que el río ha erosionado severamente las bóvedas que estaban más cerca del flujo del agua, no obstante, se hizo caso omiso y fue hasta esta última temporada de lluvia que el terreno no resistió más.

Antonio Méndez Vázquez, encargado del panteón, dijo a Milenio que han logrado rescatar algunos féretros con ayuda de cuerdas, pero el problema llegó el Día de Muertos, cuando los familiares llegaron a visitar a sus fallecidos y se dieron cuenta que muchas tumbas ya no existían.

Según el encargado, los problemas comenzaron hace cinco meses, pero fue en septiembre cuando éstos se hicieron más fuertes, al grado que el panteón ya ha perdido 50 metros de superficie.

Cabe apuntar que hasta el momento la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no ha fijado alguna postura ni ha anunciado algún tipo de medida, por lo que las afectaciones al mausoleo podrían continuar.

Familiares cuyos seres queridos están a punto de ser “tragados” por el agua han hecho un llamado al municipio de Centro para que el panteón sea reubicado lo antes posible, pues las condiciones meteorológicas de las próximas semanas tampoco son muy favorables.

Los afectados señalan que muchos de ellos no tienen suficientes recursos económicos para exhumar los restos de sus familiares y llevarlos a otro lugar con mejores condiciones.

Se tiene conocimiento que los directivos del panteón cambiaron hace apenas un mes, quienes tampoco han dado mayor información sobre el problema.

Cabe apuntar que las intensas lluvias registradas esta semana dejaron deslaves, cortes de luz y graves inundaciones en los municipios de Centla, Centro, Cárdenas, Comalcalco, Huimanguillo, Jalapa y Paraíso.

La Conagua dio a conocer que dos canales de baja presión que se extenderán sobre el sureste mexicano y el oriente de la Península de Yucatán, en interacción con inestabilidad en niveles altos de la atmósfera, ocasionarán lluvias torrenciales en Chiapas, Quintana Roo y Tabasco; así como precipitaciones intensas en Campeche, Oaxaca y Veracruz; fuertes en Yucatán y trombas marinas en Quintana Roo.

Aunque el sistema frontal número 8, ubicado al occidente del Mar Caribe, dejará de generar efectos en el país, la masa de aire frío que lo impulsó mantendrá el ambiente nocturno muy frío, con posibles heladas, en zonas altas del oriente del país y las mesas Del Norte y Central.

Asimismo, prevalecerá el viento de componente norte con rachas de 60 a 80 kilómetros por hora (km/h) en el Istmo de Tehuantepec, con oleaje de 1 a 3 metros (m) de altura en el Golfo de Tehuantepec, así como rachas de viento de 40 a 60 km/h con oleaje de 1 a 2 m de altura en las costas de Campeche, Tabasco, Veracruz y Yucatán.