En un emotivo gesto de solidaridad, el Estadio Olímpico Universitario, hogar de los Pumas de la UNAM, se vistió de rosa en el partido contra los Rayados de Monterrey, correspondiente a la Jornada 13 del Apertura 2023. A diferencia de lo que es tradicional, el color predominante en las gradas y en el terreno de juego fue el rosa, en honor al mes de la lucha contra el cáncer de mama.
Desde el inicio del mes de octubre, el inmueble universitario comenzó a ondear banderas rosadas como parte de una campaña de concienciación sobre la importancia de la detección temprana y la prevención del cáncer de mama. Sin embargo, en este partido, la directiva de los universitarios quiso llevar la iniciativa un paso más allá.
Los aficionados que acudieron al estadio para presenciar el encuentro entre Pumas y Rayados fueron recibidos con una agradable sorpresa: playeras rosas con el característico logo del equipo. Estas camisetas se distribuyeron de forma gratuita, permitiendo a los seguidores portar orgullosamente el color rosa y mostrar su apoyo a la causa.
Mes Rosa también en el futbol
Dentro del Estadio Olímpico Universitario, se habilitaron módulos donde los asistentes podían solicitar su playera en diversas tallas, garantizando que todos tuvieran la oportunidad de unirse a esta noble causa.
La solidaridad no se limitó solo a las gradas, ya que también se reflejó en el terreno de juego. Las redes de las porterías se tiñeron de rosa, al igual que las banderas utilizadas por los árbitros durante el partido. Incluso, los jugadores de Pumas lucieron dorsales en tonalidad rosa como un gesto simbólico en apoyo a la lucha contra el cáncer de mama.
Según datos proporcionados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que una de cada 12 mujeres a lo largo de su vida enfrentará la lucha contra el cáncer de mama. Conscientes de la magnitud de este desafío, durante este mes se impulsan campañas globales para promover la detección temprana, el tratamiento adecuado y los cuidados paliativos de esta enfermedad que afecta a mujeres de todo el mundo.
El cáncer de mama es una enfermedad que a menudo se presenta de manera silenciosa, sin mostrar signos ni síntomas evidentes en sus etapas iniciales.
Por esta razón, se recomienda a todas las mujeres realizar autoexploraciones frecuentes de las mamas para detectar posibles anomalías. A partir de los 40 años, se aconseja realizar mamografías de forma anual o bianual, dependiendo de las pautas médicas. Tu médico especialista te guiará en este proceso.
La detección temprana es esencial, ya que aumenta significativamente las posibilidades de un diagnóstico oportuno y, por ende, de un tratamiento exitoso.