Por su importancia en la ruta para el trasiego de droga desde Centro y Sudamérica hacia en norte de México, Chiapas se ha convertido en escenario de enfrentamientos entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), dejando no sólo decenas de muertos, también provocando una crisis de personas desplazadas por la violencia.
Según datos de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH) de enero a junio se documentó el desplazamiento forzado de 7 mil 710 personas en todo el territorio nacional, la mayoría de ellas originarias del estado de Chiapas.
Y es que la guerra que mantienen el Cártel de Sinaloa y el CJNG en los municipios de la frontera con Guatemala provocaron el desplazamiento de 3 mil 243 habitantes de Chiapas.
El siguiente estado en la lista es Guerrero con mil 397 personas desplazadas, una entidad en constante disputa por varias organizaciones criminales, entre ellas: La Familia Michoacana, Los Rojos, Guerreros Unidos, el Cártel de la Sierra y el CJNG.
Tamaulipas, otro estado con enfrentamientos en los que está involucrado el CJNG, pero ahí con el Cártel del Golfo, ocupa el tercer puesto, con un total de mil 1150 habitantes desplazados a consecuencia de la violencia.
En el reporte de la CMDPDH se especifica que mientras en estados como Tamaulipas, Chihuahua, Zacatecas, San Luis Potosí y Michoacán la violencia es generada principalmente por organizaciones criminales; en estados como Chiapas y Oaxaca los desplazamientos forzados tuvieron tres causas: violencia política, conflictos sociales y disputa de territorios.
Marchan por la Paz
Cansados de los grupos criminales que “pretenden controlar el territorio”, habitantes del municipio de Chicomuselo, Chiapas, ubicado a 25 kilómetros de la frontera con Guatemala, anunciaron una “Marcha por la Paz” para este jueves 12 de octubre.
“Cometen asesinatos, desapariciones, desplazamientos forzados, amenazas, reclutamiento y sometimiento”, lanzaron los pobladores, al tiempo que condenaron la indiferencia de los tres niveles de gobierno para atender a sus demandas.
Los habitantes de la región afirmaron que la violencia en la región se incrementó desde que el Cártel de Sinaloa y el CJNG comenzaron a disputarse la plaza. De eso ya transcurrieron dos años y las autoridades no logran poner freno a la violencia.
Empresarios se suman a las protestas
El líder de la Confederación Patronal de la República Mexicana-Costa Chiapas (Coparmex), Pascual Necochea, afirmó que en el estado sólo existe un único común denominador: “el miedo de la ciudadanía en sur y Sierra Madre del Estado”.
Por ello, el empresario urgió al gobernador Rutilio Escandón a que implemente una estrategia de seguridad que ponga fin a la violencia que está afectando a empresarios, turistas y ahuyentando la inversión privada.
Desde enfrentamientos armados, desplazamientos de habitantes y bloqueos carreteros son sólo parte de las dificultades que tienen que enfrentar miles de pobladores y visitantes al estado, resaltó Necochea.
“Nadie puede ser omiso a los hechos ocurridos en nuestra región (...) Le pedimos al gobernador Rutilio Escandón que eleve la voz y haga llegar al gobierno federal la situación real que nuestros hermanos de la Sierra Madre y Costa de Chiapas están viviendo en nuestro bello y antes pacífico estado. Predomina la inseguridad derivada de enfrentamientos entre grupos armados que aterrorizan ala población y generando mucha incertidumbre”, enfatizó.
Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en todo el 2022 se registró un total de 377 homicidios dolosos en Chiapas, mil 122 totales; mientras que en los primeros ocho meses del presente año la cifra ya es de 309 dolosos y 869 totales. De seguir con esa tendencia 2023 podría cerrar con más de mil 300 homicidios, más de 400 de ellos de carácter doloso.